Me convertí en la gemela villana de la novela

Capitulo 5

En realidad, la fiesta resultó ser mucho más divertida de lo que había creído, pues habló con bastantes personas de importancia, dejándoles claro que se encontraba en el mundo del espectáculo, abriéndose camino como actriz.

-Con tu belleza, no me extraña. Sería un pecado que los Li te dejaran encerrada en casa- comentaron, riéndose entre ellos como si fuera una broma estupenda.

Aunque lo que ella buscaba era gente que se interesara por su trabajo y la pudiera ayudar a crecer. Si no encontraba a nadie en una fiesta así, no sabría dónde más podría hacer contactos.

Después de un par de horas, tuvo que sentarse, pues, aunque los zapatos de Baimei eran preciosos, estaban destrozando sus pies y, aunque en el trabajo podía soportar casi cualquier cosa, por gusto no iba a soportar dolor.

Había más personas de pie charlando a su alrededor, así que la pareja Li, que, a pesar de su molestia hacia ella, habían seguido sonriendo y saludando a los invitados, de repente se encontraron hablando cerca de ella, sin percatarse de su presencia.

-¿Qué vamos a hacer con esa niña? Cada vez se está volviendo más desvergonzada- preguntó la señora Li, luciendo preocupada por la situación, pues había estado viendo a su hija hablando con diferentes personas a lo largo de la tarde.

Era como si su mascota se estuviera escapando de su correa, lo que les tenía que obligar a moverse.

-Es tan sencillo como buscarle un marido- soltó el señor Li, aún enfadado, pero pensando sobre el asunto con bastante frialdad.-Un buen marido que la meta en cintura y se encargue de quitarle de la cabeza esa tontería de ser actriz. En realidad, aquí hay muchas personas entre las que podemos elegir.

-¿Estás pensando en alguno de los amigos de Li Shan?- siguió preguntando la señora Li.

Aunque eso solo pareció escandalizar a su marido.

-¡¿Qué?! ¡Por supuesto que no! Esos hombres son demasiados buenos para ella. No. Necesita a alguien con más edad, que ya haya tratado con una esposa antes, pero que tenga una posición que todavía nos ayude. Tal vez alguno de los presidentes de las empresas de segunda sería una buena elección. Mientras sean de mi edad, más o menos, creo que podría bastar para poner a esa chica en su sitio para siempre. Así que sonríe más y procura venderla bien ante los demás. Con suerte, podremos solucionar este asunto esta noche.

Li Shui no pudo evitar volver la cabeza hacia ellos, sorprendida por lo que acababa de escuchar, recordando que en ese tipo de novelas de mundo asiático, los padres aún tenían mucho que decir sobre el matrimonio de los hijos. Y más si aspiraban a llegar a rangos más altos gracias a ellos.

Pero sus padres no solo estaban buscando su matrimonio para quitársela de encima, si no que, además, querían buscar a un hombre mayor, con una mente cuadriculada que la pudiera someter para que no destacara nunca más. ¿Eso era lo que pretendían?

Bueno... Al parecer, ella aún no había dado todo el espectáculo que necesitaban, pensó, apretando uno de sus puños. Pero eso era fácil de resolver.

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Tan pronto como se acercó la hora de la cena, las personas reunidas en el lugar se acercaron a las mesas circulares distribuidas en el centro de la sala, tomando asiento antes de que el hotel sirviera la comida.

A un gesto de sus padres, Li Shui se acercó a la mesa que estos ocupaban, junto a Wu Jian, su hermano menor y Zhou Yun, pues eran sus mayores accionistas, viendo que su madre le hacía un gesto para que se sentara a su lado, que normalmente sería ocupado por Li Shan.