Me convertí en la gemela villana de la novela

Capitulo 40

Ante la presentación por parte de Li Shan del tipo desconocido, que se acercó más a ellos, saludándoles con la cabeza, aunque no se veía del todo cómodo, los cuatro no pudieron evitar mirarse entre ellos, teniendo la impresión de que alguien ya les había hablado de que se produciría un encuentro como aquel.

Echando la vista atrás, recordaron la fiesta de la familia Li, el mismo evento donde Li Shui se mostró ante todos completamente cambiada y se los advirtió.

Les avisó a los cuatro de que su hermana haría más contactos en el extranjero, buscando al rey que la colocaría en la posición más alta, al mismo tiempo que, mientras se decidía, podría presentarlo como un amigo ante ellos, pues su hermana era más que capaz de mostrar esa cantidad de cara dura.

Wu Jin miró a otro lado, sintiéndose bastante incómodo con la situación, teniendo en cuenta que las palabras de Li Shui parecían haberse cumplido como una profecía. Liu Huang no miró con buenos ojos al tal William, que estaba tratando de entender lo que estaba pasando, notando el cambio en el ambiente entre ellos. Y, al mismo tiempo, mientras Wu Jian y Zhou Yun se miraban, no podían evitar fruncir el ceño, pues una sensación desagradable recorrió sus cuerpos cuando Li Shan les presentó al tipo con calma y una sonrisa en los labios.

Esta, que notó al momento que sus peces no habían reaccionado como esperaba, los miró uno por uno, buscando el problema. Pero ninguno de ellos le devolvió la mirada.

-¿Qué os pasa, chicos?- les preguntó, sintiendo una cierta sensación de pánico al ver las actitudes inesperadas, al mismo tiempo que se pintó en la cara una sonrisa tranquila y dulce.-¿Estáis molestos porque no voy a estar todo el tiempo con vosotros como habíais pensado? No os tenéis que sentir mal por ello, ya que sabéis que sacaré tiempo para todos. Sí he vuelto en mis vacaciones es para estar con vosotros. Quería seguir mis estudios, pero no podía abandonaros.

Todos siguieron en silencio por unos segundos, pero Zhou Yun fue el primero en dar un paso al frente, devolviendo su rostro a una expresión calmada, pues siempre fue el que más fácil era capaz de ceder ante ella, por mucho que su fachada le hiciera parecer un tipo frío y distante.

-Solo es que no nos esperábamos a tu amigo. No nos has dicho nada de que fueras a venir acompañada- le indicó él, tratando de mantener un tono de voz calmado, aunque su interior parecía haber recibido la explosión de una bomba.

-Oh. Fue una decisión de última hora. Apenas me dio tiempo de avisar a mis padres, así que no os pude decir nada, chicos.

En realidad, la idea de que William viniera con ella había sido suya.

Por lo que le consiguió sonsacar en sus diferentes charlas, debido a la alta posición de sus padres respecto a su país de origen, él tuvo desde joven a una amiga de la infancia que, en realidad, estaba destinada a ser su prometida, ya que sus familias habían hablado de ello casi desde que los niños nacieron. Y, por supuesto, Li Shan no iba a permitir que William volviera a casa, encontrándose con esa supuesta prometida, mientras ella no estaba presente.

¿Qué ocurriría si, durante esas vacaciones, lo que era una relación por obligación se transformaba en una relación debido a los sentimientos de ambos? Y, aunque aún no sabía si William sería su elección final, no podía dejar que se le escapara mientras se decidía, pues eso sería algo que acabaría con su paciencia.

Sus peces debían estar a su alcance hasta que ella decidiera quedarse con el mejor de todos ellos.

Hablando con él, le comentó en múltiple ocasiones lo genial que era China y lo hermosa que sería a sus ojos hasta que, después de hablar de ello durante semanas, William informó a sus padres que no volvería a casa, si no que planeaba hacer un viaje con unos amigos para seguir con sus estudios, y consiguió convencerlo de que la acompañara.