Capitulo 41

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No fue muy sorprendente que, después de un par de días después de la prueba de casting, Baimei la llamara para comunicarle que el papel de Shuang era suyo.


Pero, por supuesto, eso no evitó que las dos gritaran de alegría por teléfono cuando su agente le dió la noticia, pues todo paso adelante en su carrera era una victoria que debían de celebrar.


Además, los índices de audiencia del reality show eran altos, de la misma forma en la que Li Shui seguía pareciendo sumar seguidores en sus redes sociales, por lo que no tenía obstáculos que le hicieran difícil avanzar por el sendero que se dijo que debía de seguir.


-Tenemos que celebrarlo- le dijo a su agente.


-Pero tenemos que procurar ir a algún lugar más privado del que hemos tenido la costumbre de visitar hasta ahora- le recordó Baimei, poniéndose un poco seria respecto a ese tema.-Ya ha quedado atrás esos tiempos donde ibas a comer en los puestos de la calle, sin preocuparte por quién te mirara. Ahora, tienes una cara que la gente reconoce, así que debes cubrirte y procurar no armar un alboroto.


-Tampoco es como si tuviera millones de seguidores- se rió ella ante aquel comentario.


Era cierto que su popularidad había aumentado, lo cuál, por si solo, era motivo de alegría, y que personas habían parecido reconocerla por la calle cuando había salido en los últimos tiempos. Pero Baimei ya quería que actuara como si fuera toda una celebridad.

-Xiaoshui, sé que eres inocente y piensas que todos los fans son buenos. Pero déjame despertarte de ese sueño. Por muy pocos fans que creas tener, nunca sabrás cómo son esas personas, así que más te vale tener cuidado cuando salgas a la calle. No querrás que un acosador te siga hasta casa y se dedique a hacerte la vida imposible, ¿verdad?


-¿Has estado viendo demasiadas películas?- le preguntó ella a su vez, a pesar de que sabía que llevaba razón con ese tema.


-Yo velo por tu seguridad, cariño. Así que hazme caso. Buscaré un buen restaurante para celebrar tu nuevo trabajo y llegarás con tu mascarilla puesta. ¿Entendido?


-Entendido- aceptó ella, solo pudiendo sonreír al sentir la preocupación de su amiga.


Sin padres que vivieran con ella, siendo el mayor apoyo que había tenido en su vida, la única persona que tenía a su alrededor que se preocupaba tanto por ella como habían hecho ellos era Baimei.


Aunque... últimamente, podía añadir a Shou en esa lista, puesto que, aunque este se encontraba trabajando, no dejaba de escribirle siempre que podía, solo haciéndola sonreír de nuevo.


Sentándose en el sofá de casa, antes de tener que prepararse para la comida con Baimei, se dedicó a navegar un poco por Weibo, queriendo ver qué nuevas noticias existían entre sus conocidos, del mismo modo que revisó los pocos mensajes que algunos fans le habían dejado, aún con el debate abierto de a cuál de los chicos del programa debía elegir.


Por su parte, vio como miembros de los equipos con los que había trabajado se encontraban ocupados en nuevos proyectos, contenta de que tuvieran más trabajo entre manos.


También vio fotos de Baimei de su cuenta personal, posando en diferentes lugares como si fuera toda una estrella, siempre viéndose elegante y hermosa. Pero, por cómo estaba colocada la cámara, era imposible que esas fotos se las hubiera hecho ella misma. ¿Era cosa de Gang?

 Imposible saberlo, ya que el agente no contaba con cuenta propia en ninguna red social más que Wechat, para poder recibir mensajes, aunque parecía algo imposible en ese siglo.

Me convertí en la gemela villana de la novelaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora