Narra Frank:
Cuando acabamos de cenar, me senté en la sala de estar, Hope se subió en mi regazo para buscar un poco de afecto, acariciaba su cabecita con suavidad, esto le encantaba tanto que buscaba más. Lucy revisaba toda la cabaña, ya que le pidió a Rosemarie que enviara su ejemplar allí, quería enseñarme aquella obra de arte, a pesar de ser el entrevistado me causaba mucha curiosidad saber lo que había escrito en él.
Ya había leído artículos anteriores de Lucy, por curiosidad, ella escribía con ese profesionalismo que no censuraba nada, decía la verdad sin miedo a ser silenciada y eso era admirable.
—Revisé toda la casa, no ha llegado ningún paquete por ningún lado— se sentó a mi lado mientras suspiraba cansada
—Tranquila, ¿buscaste en la entrada? A veces cuando ven que no hay nadie dejan los paquetes en la entrada— comenté para calmarla
—Ya no lo hacen, en ocasiones se pueden robar los paquetes, entonces la responsabilidad recae sobre la empresa de envíos y ellos no quieren ese problema encima, si no encuentran a nadie regresan el paquete y lo archivan hasta que alguien vaya por él— explicó, ella como siempre tan inteligente
—Llama a Rosemarie— le dije, Lucy asintió sonriente, sacó su celular del bolsillo del abrigo, marcó un número con mucha rapidez y esperó a que contestaran
—Hola querida Lucy Dawson, ¿quieres más días de vacaciones? ¿Quieres un viaje? Pídeme lo que quieras, cariño, te lo mereces sin duda— decía complaciente, la llamada estaba en altavoz, solamente reía por la actitud de esa mujer
—Hola Rosie, no te preocupes, estoy bien, solamente quería saber sobre mi ejemplar, ¿lograste enviarlo donde te dije?— inquirió la pelirroja
—Estuve muy atareada gracias a ti, sin embargo encargué a Selene de eso, ya estaban cerrando, así que el ejemplar te llegará mañana— le explicaba, Lu suspiró
—Lo comprendo... por ello te dije que lo enviaras muy temprano, para que esto no sucediera— afirmó, ella se tomaba todo muy en serio
—Lo sé, lo siento, debí hacerte caso, lo importante es que llegará, ahora tengo mucho trabajo, así que te dejo, ve a darle cariñitos a Frank Ballad más bien— replicó burlona, cortó la llamada
—Que incómodo— murmuré riendo
—Ya lo sé, ella intimida mucho, aunque normalmente es muy profesional— ella también reía— ¿Qué vamos a hacer ahora?
—No lo sé, ¿tienes alguna idea?— la miré con expectativa
—Ya es muy de noche para nadar en la alberca, ¿conducimos un rato? Podríamos salir un poco más de la ciudad, descubrir que hay más allá, hablar más— sugirió
—Me parece perfecto, le llevaré algunas cosas a Hope— anuncié emocionado, dejé al pequeño en el sofá, me levanté de allí
—Empacaré algo de comida también— anunció.
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También es humano
Fiksi RemajaNos han enseñado toda la vida que no debemos juzgar a un libro por su portada y para poder dar una crítica verdadera lo mejor es aventurarse a leerlo, analizarlo, interpretarlo de la manera correcta, no a nuestra conveniencia, por supuesto. Pero, c...