¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
AÑO. 3070. La raza Tubulán. En el universo número dieciocho, en la dimensión número cuatro, en la realidad número uno, en el planeta número seis, entre miles y millones de dimensiones, realidades, universos y planetas existe la raza Tubulán, considerada una de las razas más fuertes, resistentes e inteligentes que ha existido. Los “cuantroxidos” son la debilidad más mortal que tienen y por ello la única (Los cuantroxidos son el cobre y el bronce). Ya que esta es la raza semi-inmortal es de las más importantes en todo el universo. En el Banco de Sedmilit, alrededor de las nueve de la noche, dos enmascarados abren un gran agujero en el banco y entran, colocan una bomba silenciadora en la puerta de la bóveda y esperan a que estalle. • "Esto va a salir perfecto ¿No crees?", dice uno de estos enmascarados. • "¡Claro que va a salir perfecto!", responde el otro enmascarado. Pero, de repente, un tercer enmascarado llega por el agujero que hicieron los ladrones, este lleva dos armas y una katana hecha de cobre y bronce. • "¡¿Tú quién eres?! ¡¿Eh?!", grita uno de los ladrones. • "Un gusto, DeathGreen", dice el tercer enmascarado. • "¡¿Qué es lo que quieres?!", grita el ladrón. • "Nada, solo avisarles, que este Banco me pertenece", dice DeathGreen. Green desenfunda rápidamente sus dos armas y luego dispara a la cabeza de los dos ladrones, muriendo instantáneamente, estos dos caen al suelo y comienzan a desangrarse, unos doce segundos aproximadamente la bomba explota y abre la bóveda del banco. Green entra muy rápida y sigilosamente y saca quinientos mil velkos de la bóveda (Ósea cuatrocientos noventa y siete mil dólares). Luego DeathGreen, sale con las bolsas de dinero del banco y se va a su casa. Una hora más tarde, Green llega a su modesto hogar, una pequeña pero acogedora residencia en un rincón tranquilo de la ciudad. El ambiente nocturno lo envuelve mientras cierra la puerta detrás de sí, sumergiéndose en la calma de su refugio personal. Con pasos cansados pero determinados, se quita el equipo de vigilancia y se prepara un sencillo tazón de cereal, dejando que el clic-clic familiar de la cuchara contra el bol llene la habitación con su ritmo reconfortante. Mientras se acomoda en el sofá, la pantalla del televisor destella con las noticias del día, pero Green apenas presta atención, perdido en sus pensamientos mientras reflexiona sobre los eventos recientes. Con un suspiro, apaga el televisor y se dirige a la cama. DeathGreen despierta, ve que ya son las doce y media, así que rápidamente sale a la plaza de Sedmilit que queda a media hora de donde él vive, Green toma el dinero que robó y sale de su casa para darlo a las personas de la ciudad de Sedmilit, así que se prepara para salir de su hogar, toma su katana y sus dos armas, se coloca su chaleco antibalas, su hoodie verde con negro, su pantalón de camuflado color verde oliva, sus guantes y botas color negro, su mascara, que se ve bastante intimidante, Green mide alrededor de un metro con ochenta y siete, se veía bastante corpulento, la expresión en su mascara daba mucho miedo, aparte él tenía la reputación de ser “El puntería perfecta” ya que nunca en su vida falló un tiro con su pistola.
