Mellitus: drive for my life

13 | Capitulo Trece: Distancia Bajo el Hielo

Olivia se sumergía en la melodía de "Hide Away" de Daya mientras subía al carro que los llevaría a la pista de hielo. Se sentó sola, recargando su cabeza en la ventana, perdida en pensamientos sobre la reciente distancia que había notado en Oliver estos días.

El ambiente se interrumpió cuando Kimi se acercó tímidamente.

— ¿Me puedo sentar?

Una leve sonrisa se dibujó en los labios de Olivia mientras asentía. Kimi tomó asiento a su lado.

— ¿Qué estás escuchando? —preguntó curioso.

Olivia le ofreció uno de sus audífonos. Juntos compartieron la canción mientras el resto de los chicos se acomodaban en el carro.

Mientras tanto, Oliver subía al carro y no pudo evitar notar a Olivia y Kimi juntos. Intentó ignorarlo inicialmente, pero la incomodidad y los celos comenzaron a aflorar en su interior.

—¿Qué están escuchando? —preguntó Oliver, tratando de ocultar sus emociones mientras encontraba un asiento cercano.

Olivia le mostró la pantalla de su teléfono, explicándole por qué amaba esa canción. Kimi se unió a la conversación con entusiasmo, compartiendo sus propios gustos musicales y otros intereses en común.

A medida que avanzaba el viaje, Oliver observaba a Olivia de vez en cuando, preguntándose qué había cambiado entre ellos. Recordó los momentos compartidos, las risas y las conversaciones profundas que solían tener, y sintió un impulso de reconectar con ella.

Cuando finalmente llegaron a la pista de hielo, todos bajaron del carro con entusiasmo. Olivia se despidió amigablemente de Kimi y se acercó a Oliver, quien la esperaba con una expresión indecisa en el rostro.

—¿Podemos hablar un momento? —le preguntó Oliver seriamente, alejándose del grupo hacia un rincón más tranquilo.

Olivia asintió con curiosidad y lo siguió, sintiendo que la tensión entre ellos finalmente saldría a la luz. Sabía que algo estaba sucediendo y esperaba que Oliver finalmente explicara lo que estaba pasando.

En ese rincón apartado, Oliver tomó una respiración profunda antes de hablar.

— Olivia, últimamente he sentido que nos hemos distanciado un poco. Tanto por ti y por mi...

Ella asintió lentamente, mirando hacia abajo antes de responder.

— Sí, lo he sentido. No sé qué ha pasado, Oliver...

Antes de que Oliver pudiera continuar, Dino apareció corriendo hacia ellos con una expresión de emoción en su rostro.

—¡Liv, ven a ver esto! —exclamó Dino, casi sin aliento.

Oliver y Olivia se volvieron hacia él, y Dino señaló emocionado hacia una figura grande y colorida al otro lado de la pista.

— ¡Hay un Shrek navideño!

Los ojos de Olivia se iluminaron y una sonrisa genuina se extendió por su rostro.

— ¡Oh, tengo que verlo! — exclamó, olvidando momentáneamente la conversación con Oliver.

Dino la tomó de la mano y ambos corrieron hacia el enorme Shrek vestido con un traje de Santa Claus. Olivia no pudo contener su emoción y se sacó una foto con el Shrek navideño y con Dino.

Oliver observó desde la distancia, sintiendo una mezcla de alivio y frustración. La conversación había sido interrumpida, pero también había visto la sonrisa radiante de Olivia, algo que le recordaba por qué la apreciaba tanto.