14 | Capítulo Catorce: La Estrategia del Corazón

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Los preparativos para recibir el Año Nuevo en el equipo de Prema Racing estaban en pleno apogeo. Las luces brillaban intensamente, la música resonaba en el aire y el ambiente festivo se contagiaba en cada rincón del lugar. Kimi y Olivia estaban disfrutando de la compañía mutua, riendo y charlando como en los viejos tiempos. Sin embargo, la relación entre Olivia y Oliver no era la misma. Las risas y los momentos compartidos ahora parecían forzados.

Oliver observaba desde la distancia, su mente invadida por una mezcla de celos y tristeza. Aquel beso entre Kimi y Olivia que había presenciado semanas atrás seguía atormentándolo. Para él, no había duda de que sus dos mejores amigos eran ahora pareja. Aunque la idea le dolía, también se sentía feliz en cierta medida, pues había sido él quien los había acercado.

El reloj marcó la medianoche y el sonido de fuegos artificiales llenó el cielo. Oliver revisó su teléfono y encontró un mensaje de su ex, Estelle, quien le deseaba un feliz Año Nuevo. Con una mezcla de nostalgia y deseo de olvidar sus problemas, respondió al mensaje con cortesía. No quería pensar en Olivia y Kimi.

—Feliz Año Nuevo, Estelle. Espero que estés bien —tecleó antes de guardar su teléfono.

La fiesta continuó con los chicos mayores de edad bebiendo y riendo. Olivia, observaba a sus amigos con una sonrisa en los labios, disfrutando de la velada sin participar en las bebidas. Oliver, sin embargo, no tardó en tomar demasiado. Las risas se volvieron más ruidosas, las voces más alegres y las inhibiciones comenzaron a desvanecerse.

—Es hora del karaoke! —gritó Paul, uno de los miembros del equipo, levantando una botella de champán. La idea fue recibida con entusiasmo y, rápidamente, organizaron una ruleta en el celular para elegir las parejas al azar.

—¡Vamos a ver quién canta primero! —exclamó Gabriele mientras giraba la ruleta virtual.

El primer par fue anunciado y las risas estallaron. Uno tras otro, los nombres fueron saliendo y las canciones llenaron el aire. Finalmente, la ruleta se detuvo en los nombres de Oliver y Olivia. Una tensión palpable se apoderó del lugar mientras ambos se dirigían al frente.

—Listos para cantar? —preguntó Gabriele con una sonrisa maliciosa.

Oliver asintió, tratando de ocultar sus sentimientos bajo una fachada de valentía. La música comenzó a sonar y las primeras notas de "Moth to a Flame" de The Weeknd inundaron la sala. Ambos comenzaron a cantar, pero Oliver no pudo evitar dejar entrever sus sentimientos en cada línea que entonaba.

—It's just one call away
And you'll leave him, you're loyal to me
But this time I let you be.. —cantó Oliver, mirando a Olivia con una intensidad que no pudo esconder.

Olivia captó las indirectas, pero decidió ignorarlas, pensando que era solo el alcohol hablando a través de Oliver. Sin embargo, la tensión entre ellos era innegable. Sus voces se entrelazaban, creando una atmósfera cargada de emociones no resueltas.

Al terminar la canción, una ovación estalló, pero Oliver apenas lo notó. Su mirada estaba fija en Olivia, quien evitaba hacer contacto visual. La fiesta continuó, pero para Oliver, todo parecía un borrón.

Horas más tarde, cuando la fiesta comenzó a decaer, Oliver se dirigió a la cocina para despejar su mente. Al entrar, vio a Kimi y Olivia muy juntos, hablando en susurros y riendo. La visión lo atravesó como una daga. Sin pensarlo dos veces, sacó su teléfono y llamó a Estelle.

—Hola, Estelle. Soy Oliver. Necesito verte pronto —dijo, su voz quebrada por el dolor y el alcohol.

—Oliver, ¿estás bien? —preguntó Estelle, su preocupación evidente.

Mellitus: drive for my lifeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora