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Once Upon a Time
.Agatha se encontraba en la cocina de Ramshackle, desayunando con Grimm en lo que prometía ser otro día solitario y gris de las vacaciones de invierno. Con su bufanda de Slytherin y su suéter grueso, intentaba mitigar el frío que se colaba por cada rendija de la vieja casa. Aunque el lugar estaba decorado con luces y guirnaldas, el ambiente seguía siendo desmotivador para ella. El clima gélido hacía que sus defensas, ya de por sí débiles, se resintieran más, aumentando su aversión por el invierno.
Mientras mordisqueaba una tostada y sorbía su café, Grimm, entre bocados de su propio desayuno, la miró con sus grandes ojos curiosos y lanzó una pregunta que la tomó completamente por sorpresa.
-Oye, secuaz, ¿qué es tener una familia?-
Agatha casi escupió su café, la inesperada pregunta de Grimm golpeándola con fuerza. Tras un momento de reflexión, donde sus pensamientos viajaron a través de recuerdos agridulces, se encogió de hombros y respondió con un tono un tanto amargo.
-Bueno, técnicamente, la familia son los individuos con los que compartes sangre. Es decir, las personas con las que estás relacionado biológicamente. Pero...- Agregó con una ligera pausa- ¿Tú tienes familia, Grimm?-
El pequeño monstruo parpadeó y frunció el ceño, esforzándose por recordar.
-No lo sé, no lo recuerdo. Mi primer recuerdo es que todo estaba oscuro y tenía mucha hambre... Luego te conocí a ti-
Agatha sintió una oleada de ternura al escuchar esto. Sonrió y acarició la cabeza de Grimm con suavidad, sus palabras llenas de una calidez sincera.
-Sabes, Grimm, en realidad hay dos tipos de familia. La que escoges y con la que naces. Los amigos y esas personas que siempre están para ti, que te cuidan y te aceptan, ellos son la familia que escoges-
Grimm la miró fijamente, procesando sus palabras antes de sonreír ampliamente.
-Entonces, tú eres mi familia, ¿verdad?-
Agatha sintió un nudo en la garganta y una calidez en el corazón al escuchar eso. La simpleza y la sinceridad de Grimm derritieron un poco del hielo que la rodeaba, no solo el del clima, sino también el que había construido alrededor de su corazón.
-Sí, Grimm, somos familia- Dijo suavemente, sus ojos brillando con una mezcla de gratitud y afecto- Y no importa el frío o lo solitarias que parezcan las vacaciones, mientras estemos juntos, nunca estaremos realmente solos-
Grimm se acercó más, frotando su cabeza contra el brazo de Agatha, sintiéndose reconfortado por sus palabras.
-Bueno secuaz ¿Que planes tenemos para hoy?- Pregunto Grimm-
