El Arcangel Raphael🥰

capitulo 10; El campamento.

Corremos a toda velocidad, derrapando sobre la tierra. La chica corre detrás de mi, pero  queda claro, por el ruido de los perros que nos están alcanzando, intento pensar en nuestras posibilidades, la carretera esta bastante lejos para meternos en un auto, tendrá que ser un arbol. Comienzo a mirar los arboles, estos crecen muy altos y rectos, la rama mas baja esta  casi a un salto de mi estatura, suponiendo que tenga mis alas, como no es así, tendré que pensar de que otra forma subir. Comienzo a saltar lo más fuerte. Pero no es suficiente. Le doy un golpe al tronco con frustración. Luego volteo a verla y le digo.
-subete a mis hombros. La agarro de la cintura y la levanto hasta ponerla sobre mis hombros, ella se estira todo lo que puede, pero veo que le falta. Decido poner mis manos debajo de sus pies y la impulso hacia arriba, logra subir a ella, luego al parecer busca algo para ayudarme a subir, pero se que es inútil, entonces comienzo a correr, la verdad es que no tengo un plan. Lo más importante es esconder mis alas, no me pueden atrapar con ella. Mientras corro diviso un arbusto bastante grande a unos centímetros. Decido esconder la manta con las alas ahí. La lanzo y luego acomodo  el arbusto para que queden totalmente tapadas, escucho  a los perros acercarse, vuelvo a correr, la idea es que no me encuentren cerca. Cuando siento que estoy lo bastante lejos de el,  comienzo a bajar la velocidad, me falta el aire. Todavía no me he recuperado por completo de las heridas de mi espalda. No puedo dejar de pensar en mis alas, espero que penryn las encuentre luego de que estos hombres me capturen. Los perros se acercan, uno me ataca mordiendo mi pierna izquierda, suelto un alarido de dolor. Luego me callo. Los hombres se acercan apuntando con sus rifles, levanto mis manos en señal de rendimiento. Me agarran de los brazos, me atan con una cuerda y me escoltan. Uno de ellos agarra mi mochila, Me aseguro de no mirar hacía arriba, miro fijamente hacia el frente. Y caminamos lo que parece un gran techo. Estamos llegando a lo que parece un conjunto de edificios destruidos, pero de cerca, los edificios se ven intactos. Al parecer alguien ha acomodado algunas ramas estratégicamente para que parezca que esta en ruinas y abandonado. Cuando llegamos, más hombres con ropa de camuflaje nos recibieron. Los perros son conducidos a la perrera. Luego me empujan hasta el medio del campamento, si lo podemos llamar así. Me empujan y caigo de rodillas al suelo. Ellos me rodean y discuten que haran conmigo. Yo solo pido que no me saquen la camiseta. Luego uno se agacha y me pregunta.
-¿donde está tu compañero de viaje?
No le respondo.
-¿has estado en el ejercito?
Pienso por un momento y les respondo.
-viajo sólo, y estuve en la marina por dos años.
Ellos me observan un poco, pero al parecer están satisfechos. Me levantan y me conducen hasta el edificio más pequeño. Me llevan a lo que parecen pequeños compartimientos, como celdas de una carcel. Llegamos a una, me siento en una silla, aún con las manos amarradas. Estos se ponen frente a mi, lo primero que hacen es abrir la mochila y sacan su contenido para analizarlo. De ella sacan un hornillo de campaña, dos tazones, dos cucharas. Me miran
-¿no que venías solo?. -traes un hornillo pero no traes cerillas, ni ollas, pero si dos tazones y dos cucharas. Me imagino que tu otra mitad de las provisiones la trae tu compañero.
-¿porque no nos dice donde está? -no queremos hacerles daño.
Decido no responder. Luego de unos minutos se siente un olor a comida, 
Luego se miran entre ellos.
-vamos a comer, tal vez si le damos tiempo, recuerde como hablar de nuevo. Dice entre risas. Todos se retiran y cierran la celda. Me quedo ahí sentado, realmente muero de hambre, espero que estos me traigan comida si piensan volver para interrogar. Pasan unas horas hasta que vuelven, deciden simplemente sentarse y observar..
-entonces.. ¿Ya has pensado lo que vas a responder?
No digo nada.
-dejalo, ya está oscuro. Seguramente su compañero esta viendo como entrar. Lo hemos atraído con el olor de la comida. Luego apenas se escucha el ruido de una puerta abierta, uno de los hombres, al parecer el jefe le pide al otro que apague la linterna y hace callar a todos. Se escuchan pasos.
Cierro mis ojos y pido al cielo que no sea Penryn. Pero cuando siento que se acerca, decido susurrar <<corre, Penryn>>. Espero que no sea ella, pero si lo es. Espero que me haga caso, por una vez en su vida.
Cuando escucho la puerta de mi abriendo. Se que ya es demasiado tarde.
-¿por qué nunca me haces caso? Aún susurrando. Ella entra y cierra la puerta. Realmente hay humanos tan estúpidos.
-¿asi me recibes cuando vengo a rescatarte? Responde también susurrando.
-No me estás rescatando, te estas dejando atrapar.
-están dormidos. Dice mientras se acerca a mi silla y saca lo que parece una navaja, para cortar la cuerda.
-no, no lo estan. Antes de que ella llegue a tocar la cuerda, una luz se enciende. 
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Si llegaron aquí podrían apreciar que las cosas se van calentando y conocemos a otros personajes de la historia que van a marcar la historia más adelante.

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