Capítulo 14.
═══════ •♡• ════════
Nicole Valencia.
El agua fría cae por mi rostro mientras que a ciegas busco la toalla que siempre dejo cerca del lavamanos, cuando la encuentro me seco mi rostro. Dejo la toalla en su puesto y miro mi reflejo. Mi rostro está un poco sonrojado, mi cabello se encuentra recogido en una coleta y mis ojos brillan de una forma especial.
Salgo del baño para mirar a Mateo que sigue dormido en mi cama. Luce tranquilo y parece no molestarle que el sol mañanero le esté dando en toda la cara.
Mi pecho se llena de una sensación de calidez. Las últimas semanas han sido algo completamente fuera de mi rutina, pero no podía quejarme, me sentía muy bien con todo lo que estaba sucediendo.
Me sentía bien con Mateo en mi cama, descanso después de pasar la noche con nuestros amigos. Me sentía bien con lo que había pasado entre nosotros, con la conversación de anoche. Me sentía bien con nuestra conexión.
Estábamos bien, y eso era lo que me importaba.
Las personas en las redes nos relacionaban cada día más, pero los ignoraba, realmente no sabían lo que pasaba, y yo no estaba interesada en explicarles.
Me acerco a mi cama para ver más de cerca al pelinegro que reposa en mi cama, pienso si debería volver acostarme en su cama o empezar mi día. Son las once de la mañana.
Antes de tener una decisión, Mateo se mueve, se queja por lo bajo hasta que abre sus verdosos ojos. Me sonrió cuando me nota.
—Muy buenos días. —Su voz ronca saluda despacio. Como si aún le costara estar completamente consiente.
—Buenos días. ¿Descansaste?
—Sí, bastante bien, gracias a ti. —Mateo sonríe, aún con los ojos entrecerrados por la luz del sol que se cuela por la ventana.
Me siento suavemente en el borde de la cama, mirando a Mateo con cariño. Una pequeña sonrisa juguetea en mis labios mientras recuerdo la noche anterior y la conversación que habíamos tenido.
—Me alegra saberlo. Anoche fue esclarecedor, ¿verdad?
Mateo asiente con la cabeza lentamente, su mirada encontrando la mía.
—Sí, definitivamente. Me gusta cómo nos llevamos, Nicole. Es... diferente, pero en el buen sentido.
Asiento, sintiendo cómo mi corazón late un poco más rápido ante sus palabras. Me siento feliz de estar compartiendo estos momentos con él, lejos de las expectativas y los comentarios externos.
—Sí, es diferente. Y me gusta también. —Respondo con sinceridad, mi voz suave en la calma de la habitación.
Mateo se incorpora un poco más en la cama, apoyándose en un codo mientras me observa con atención.
—Oye, ¿qué tan buena eres componiendo? Necesito ayuda con una canción que estoy escribiendo. —Me pregunta con una sonrisa juguetona.
Río suavemente, sintiéndome halagada por su pregunta.
—No soy experta, pero puedo intentarlo. Aunque no prometo nada espectacular.
Mateo hace una mueca burlona.
— ¡Eso suena a reto! Seguro que eres mejor de lo que crees.
—Por ahora, levántate, vamos a hacer el desayuno.
Dejo un casto beso en sus labios antes de caminar a la cocina. Lo escucho levantarse e ir al baño, mientras el viene saco tostadas, galletas saltin y dos pedacitos pequeños de pan. Saco una chocolatera y echo aguadepanela más chocolate en polvo, lo pongo en la estufa y le pongo fuego alto.
ESTÁS LEYENDO
Algo más©.
Roman d'amourCOMPLETO. El es un cantante que conquista corazones y ella una creadora de contenido cuya autenticidad cautiva a millones. La gente los ve como la pareja perfecta, pero ellos saben que su relación es algo más. Una mañana, mientras desayunan juntos...
