Poderes

Capitulo 50: La sombra intrascendente.

Capitulo 50: La sombra Intrascendente
<<Desde la perspectiva del campo de batalla>>
— Esta todo a quemar, Ay ay ay ay — dice Emilio, mientras sus pies se sancochan debido al ataque de Aaron
— Es más sencillo, que te rindas, amigo. — le dice Aaron a su rival
— ¿Dónde viste ese sueño?, jajajajaja — se ríe Emilio
— ¿Dónde?, en tus sueños. — Aaron directamente hacia Emilio nuevamente para atacarle — ¡¡INFERNUS PUGNUS!! — El ataque de Aaron va directamente hacia el rostro de Emilio.
Sin embargo, el presente ataque logra conectar con el lazo de los brazos de Emilio, haciendo que se vayan evaporando por el poder del fuego infernal que tiene Aaron. A lo que el Joven Emilio, decia:
— Tal parece que no me voy a rendir, eh. Jejejejeje — le dijo Emilio a su rival
— No te vas a rendir?, haré que lo hagas jovenzuelo. — dijo Aaron, mientras seguía atacando.
Luego de que Aaron siguiera atacando, Emilio se dio cuenta de que podría atravesar todas las llamas y quedarse en uno de los muros del santuario celestial, resguardandose del calor que emana en el campo de batalla. Sus ojos determinantes estaban puestos en el campo de batalla, mirando que si puede avanzar. Por lo que, sin duda alguna, notó uno de los dragones celestiales.
— Chicos, parece que es cierto, lo que decía Joel. — decía Celestina
— Entiendo, así que eso era... — pensó August
— No me gustaría que él tuviese la razón ahora, pero Emilio puede resistir este ataque. — dijo Emmanuel a sus compañeros
— No es solo resistir Manu. El ataque de Aaron le vino perfecto, aunque sea dañino para su cuerpo, él sabe que puede resistirlo. Es inteligente. — comenta Dallas
— Parece que luego de que terminen las batallas de los octavos de final, podemos decirle que tenía razón jajaja, parece que nuestro joven Joel, ha avanzado. Tiene más razonamiento. — apunta Emmanuel
Continuando en la batalla entre Emilio ante Aaron, el espíritu resistible que tiene el joven Lee es espectacular. Ha sabido manejar cualquier situación que se le ha presentado, y ahora mismo, él nota algo discontinuo y es que su rival está mostrando signos de fatiga muscular.
— Es momento de atacarte nuevamente, no vas a escapar de mi... Ataque infernal: Go... — Aaron pensaba en atacar a su rival, pero nota que se encuentra cansado.
— No puede estar pasando. Él debería estar más agotado que yo, su poder humano, no puede ganarme a mi. — pensó Aaron
— Parece que aquí me siento mejor, ese campo muy infernal, me aterra, pero me cansa más. No siento nada sobre Aaron. Pero viéndolo desde aquí, esta agotado. — pensó Emilio, mientras estaba en el muro del campo de batalla.
— Creo que puedo hacer algo más para debilitarlo, aunque mi intención es hacerlo gastar mucho poder, hasta que quede sin ninguna gota posible. — pensó Emilio nuevamente.
La batalla estaba por llegar a su fin, pero el enfrentamiento apenas había comenzado, para ambos. Emilio está demostrado que la fuerza humana podía resistir incluso las llamas del infierno. Ahora, ambos luchadores se preparaban para el próximo asalto, sabiendo que solo uno saldría victorioso.
El estadio guardó silencio por un breve momento, anticipando el siguiente movimiento. La batalla entre el poder infernal y la pura fuerza humana estaba lejos de terminar.
<<Desde un bosque cercano al santuario celestial, donde se encuentran Joel y su amiga Kendra>>
— Aquí quería hablar contigo a solas, Kendra. — dice Joel
— ¿Qué tan importante es la noticia que quieres contarme? — le pregunta Kendra a su amigo.
— Mira, en realidad. Tenemos una amistad de muchos años, sabes?. Entonces, quiero decirte algo muy importante, un par de cositas. — dijo Joel
— Dímelo ya! — le suplica su amiga Kendra
— No seré más un dragón celestial, tendré el mismo poder o un poder más elevado, quizás, pero no será por entrenamiento. Será a costa de algo que tengo planeado hacer desde hace mucho tiempo. Este poder que me otorgó él, será para mejorar mi destrezas en batalla. — comentó Joel
— ¿Me estás diciendome, que vas a renunciar como uno de los dragones celestiales? — pregunta su amiga Kendra.
— Así es, no seré uno de ellos jamás. Yo luego de esta platica hablaré con ellos. — dijo Joel
En ese momento, al instante pensó su subconsciente quien estaba manejado por el chip de autorización: "No irás al santuario celestial. Irás al templo de los dragones celestiales y destruiras una parte de ese templo con tu propio poder y un agregado del nuestro , para que, después, vayas a ese lugar, lugar donde nosotros la organización vortex te abrigará y te cuidara de todo".
— Pero, pero... — las lágrimas de Kendra salían a flote.
— No llores, Kendra. Lo hago por nosotros. — dijo Joel
En ese momento, Kendra le pega una cachetada en el rostro a su amigo Joel diciéndole:
— ¿Qué crees que estás haciendo?, ¿Cómo que por nosotros?, No te creo nada. Eres un estúpido. — decía Kendra, mientras seguía llorando
— Me entenderás en su momento. Te daré un espacio amiga mía, eres alguien increíble. Si quieres golpearme, hazlo. No tengo ningún problema. — dice Joel
En tal momento, Kendra golpea a su amigo Joel en el rostro enviándolo a volar y estrellar junto a un árbol que estaba cerca de ambos.
— ¿Eso es todo, lo que tienes?, Kendra. — le dice Joel que está golpeado
— Eres un estúpido. — le dice Kendra a su amigo, mientras lo seguía golpeando una y otra vez
— ¿Es todo tu poder?, ¿Así no le puedes ganar a nadie, Kendra? — le pregunta Joel
— No se, porque razones te irás, ni a donde te irás. Pero eres mi amigo, no. Tu eres la persona de la cual yo me enamoré. No lo puedo ocultar. — lo dice su amiga Kendra, llorando.
— ¿Que estas diciendo, Kendra? — le pregunta nuevamente Joel.
— Estoy enamorada de ti, y claro que no tengo mucho para darte. Sin embargo, no podría dejar que te escaparas de mi, fácilmente. Tu te vienes conmigo. No conmigo, con nosotros. Somos tu familia. No seas la sombra de nadie. — le exclama Kendra a su amigo, mientras ella sigue llorando sin parar
— Kendra, tus palabras son muy lindas. Pero, no hay vuelta atrás. Tengo algo que hacer, algo muy importante. — dice Joel
— Pero, pero... — ruega Kendra.
— Pero nada. Kendra, tu debes hacerte fuerte por ti misma. ¿No entiendes lo que te estoy diciendo? — le pregunta Joel a su amiga
En ese momento, sale un espíritu maligno alrededor del dragón celestial Joel que lo contamina por mucho, hasta que se vuelve totalmente oscuro. En segundos, Kendra nota que su amigo ha cambiado totalmente, y además, le exige: "Joel, vuelve. Por favor, no te vayas de mi lado". Después de las palabras sensibles de Kendra. Joel le dice unas últimas palabras de despedida:
— Se que no hablamos tanto, como deberíamos. Pero, te considero una persona fenomenal y genial. Te quiero y te valoro muchísimo. Cuando me contaste que estabas enamorada de mi, o bueno que lo estás, significa mucho para mí, y yo estoy....
Después que Joel dijera las anteriores palabras. Ese espíritu que salió del chip, activa sus nuevos poderes y su nueva personalidad maligna, para cumplir todo lo que le pidió su líder. Joel se aloca, se descontrola debido a la activación del chip del líder de la organización vortex.
— ¡¡AAAHHHHHHHHH!!, ¡¡AAAAHHHHHHHH!! — Gritaba Joel mientras el espíritu maligno se instalaba sobre su cuerpo.
— ¿Joel? — Se sorprende Kendra.
— ¡¡¿JOEEEELLLLLLL?!! — Gritó Kendra, exclamando el nombre de su amigo, del cual está enamorado.
En ese momento, nadie notaba ese poder. Pero, Joel notó que ese poder maligno recorría por todo su cuerpo.
— Oh por nuestro rey, nuestro rey. Que digo nuestro rey, nuestro Dios. Este es el mundo que quieres gobernar, este es el mundo que me has dado. Lo voy aprovechar, a todo insignificante que esté cerca de mí, lo mataré. Y quien quiera irse conmigo, mientras no tenga poder oscuro, también lo mataré, jajajaja. — exclamaba Joel, mientras su poder oscuro se mostraba en el bosque cercano al santuario
— Voy a reducir mi poder, <Joel reduce su poder para mantenerse en silencio sin que nadie note la enorme cantidad de energía> perfecto. Así quedará. — dice Joel mientras se va caminando al templo de los dragones celestiales.
Cuando Joel toma rumbo para el templo de los dragones celestiales, su amiga Kendra, quería irse con él:
— Joel, quiero irme contigo. No me dejes sola, por favor. No te vayas. — dice Kendra, llorando.
— ¿Venir conmigo, dices?, Eso es absurdo. Eres solo una mosca, tan diminuta a la cual debo derrotarla. En realidad, no me interesas. — arrogantemente lo decía Joel
— No me dejes sola, te lo ruego. Yo hago lo que tu quieras... — en llantos, lo dice Kendra.
— Parece que mi primer ataque con este nuevo poder, lo usaré contigo, bastarda. ¡¡RUGIDO DEL DRAGON DE LA TORMENTA!! — dice Joel, mientras el rugido lleva a su amiga Kendra, a volar y golpeándola en la cabeza y haciendo que se quede inconsciente en el suelo.
Un rugido ensordecedor que invoca una tormenta de viento y relámpagos oscuros se hace presente cerca del santuario celestial. Cuando eso pasa, los dragones celestiales se dan cuenta de que un enorme relámpago se ha asomado frente a ellos, mientras que ellos piensan:
— Llevaba muchos meses sin llover por acá, me parece a mi, eh. — dice Emmanuel
— ¿Lloviendo?, Es rara vez que llueva sin embargo, me encanta que ocurra todo esto. — sonríe August
— Es importante que llueva así, todo se pone aún más picante, jejejeje — dice Dallas mientras toma una cerveza en su envase vikingo.
<<Desde el campo de batalla>>
Las llamas infernales se están borrando, debido a la lluvia intensa que cae en el santuario celestial. Eso hace que las llamas infernales no sean un impedimento para que Aaron siga atacando. Por lo cual, Emilio, se nota aún más confiado, y feliz, diciendo:
— Ay Aaron, sabes?, parece que nuestro rey, nos bendice a todos. Jejeje.
— Cht, mal momento para esta lluvia que no es para nada fenomenal. Que rabia. — piensa Aaron.