Capítulo 18

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La brisa marina acariciaba la costa australiana donde los cuatro amigos, ahora más unidos que nunca, buscaban refugio. Jack y Sophie caminaban juntos por la playa, sus pasos marcando un ritmo de determinación y esperanza en medio de la incertidumbre.

-Esto es todo lo que encontramos por ahora -comentó Jack, dejando caer una mochila llena de provisiones y ropa-. No es mucho, pero debería ayudarnos por un tiempo.

Sophie asintió, su mirada perdida en el horizonte. -Gracias por liderar con esto, Jack. No sé qué haríamos sin ti.

Jack sonrió levemente, sintiéndose reconfortado por las palabras de Sophie. En medio del caos y la desesperación, su conexión se fortalecía cada día más.

***

Mientras tanto, Aiko y María exploraban las cercanías en busca de suministros adicionales. Encontraron algunas herramientas útiles y algo de comida en una casa abandonada cerca de la playa.

-No es mucho, pero es algo -afirmó Aiko, guardando las herramientas en una mochila-. Tenemos que seguir buscando.

María asintió, su expresión seria pero decidida. -Necesitamos más provisiones si queremos sobrevivir aquí.

***

Jack y Sophie se sentaron juntos en la arena, mirando el océano mientras el sol se ponía lentamente en el horizonte.

-¿Crees que podremos salir de esto? -preguntó Sophie, su voz cargada de preocupación.

Jack tomó su mano suavemente. -Lo haremos. Tenemos que mantenernos fuertes y unidos.

Sophie asintió, sintiendo un nudo en la garganta. -No sé qué haría sin todos ustedes.

Jack la abrazó, sintiendo el peso de la responsabilidad sobre sus hombros. En medio de la adversidad, encontraron consuelo y fuerza el uno en el otro.

***

De regreso en la casa abandonada cerca de la playa, Aiko y María se unieron al grupo. Colocaron las provisiones en el suelo y comenzaron a planificar su próximo movimiento.

-Tenemos que encontrar un lugar seguro donde podamos establecernos por un tiempo -reveló Aiko, mirando a sus amigos con determinación-. Necesitamos un plan.

Sophie asintió, su mente trabajando a toda velocidad. -Podemos usar esta casa como base temporal. Necesitamos reorganizarnos y pensar en nuestro siguiente paso.

Jack estuvo de acuerdo, evaluando las opciones. -Necesitamos comida, agua y refugio. Todo lo demás puede esperar.

***

Mientras discutían sus planes futuros, el cielo se oscureció lentamente sobre ellos. En la distancia, pudieron escuchar el suave murmullo de las olas rompiendo en la playa.

-Mañana comenzaremos temprano -aseguró Jack, mirando a sus amigos con determinación-. Tenemos que estar listos para lo que sea que venga.

Sophie asintió, sintiendo un atisbo de esperanza en medio de la oscuridad que los rodeaba. -Estaremos listos. Juntos podemos superar esto.

Con renovada determinación, los cuatro amigos se acurrucaron juntos en la casa abandonada, encontrando consuelo y fortaleza en la compañía mutua. Sabían que el camino por delante sería difícil, pero mientras permanecieran unidos, sabían que podrían enfrentar cualquier desafío que el destino les presentara.

Sobrevivír.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora