☆քɛʀʀɨȶօֆ☆

94 10 54
                                    


No sabía que los omegas podían tener algo bello, o alguna energía que le hiciera perderse en el tiempo y en ese omega. Pero, él más que nadie respetaba las leyes del futuro rey.

─ Debemos ir. ─ Puso a Louis de pie y le señaló el camino.

─ Ssí. ─ Con pasos tímidos, avanzó. Gafe a su lado pero un paso más lento que él, lo fue cuidando hasta que llegaron al centro.

Omegas y la familia del omega que se había reunido con Louis, estaban ahí. Inmediatamente y gracias a la altura que tenían los alfas, Gafe notó que Ezel no estaba. Imaginaba que ya había ido por el príncipe, esperaba que no fuera nada inoportuno, ya que seguramente a estas horas empezaría el ensayo de su boda.

─ Espere cerca de su casa, el príncipe llegará pronto.

Al escuchar esas palabras, Louis preguntó contento. ─
¿Harry va a venir?

─ Ha... emh el príncipe, sí. Él vendrá pronto. Es una orden que nadie puede tocarlo sin su permiso o sin que se sienta totalmente seguro. Debe de juzgar esta situación.

─ Ooh... bbien. ─ Asintió y caminó a su casa, podía verla desde aquí, así que podía ir rápido con Harry al verlo llegar.

Los pocos minutos pasaban entre susurros de los omegas, al estar reunidos, se podía oler la angustia y temor en cada aroma. No podían mostrar molestia a pesar de que tratará de un cachorro que no fue aceptado por su familia, ahora tenía el respaldo y estaba bajo el cuidado de su príncipe. En menos tiempo de lo esperado, un carruaje llegó haciendo tronar la tierra salvajemente, con los caballos desatando una gran nube de polvo.

Inmediatamente al frenar, ese alfa que empezaba a mostrar cada día más autoridad, bajó. Sus prendas deslumbrantes ante todos los omegas, se movían con cada paso, el oro brillaban más, las joyas se notaban ante el sol. Todo digno de un ensayo de boda.

─ Harry.

Esa voz lo hizo girar su rostro, deteniendo sus pasos.

Louis llegó con él, una pequeña sonrisa confusa se mostró en sus labios. Era la primera vez que veía esa expresión en el rostro de Harry y en su aroma.

Harry acercó su mano a su muñeca, con una mirada seria la obvervó. Toda su sangre sentía calentarse, sentía a su alfa ser bañado en furia. ─ Ve con Jesfe, cachorro.

─ Sí, Harry. ─ Respondió bajito.

Jesfe se acercó, tomando la mano de Louis.

─ Revisa sus muñecas para saber si necesita algo. Vayan a Rilu.

─ ¿Necesita qué haga algo antes, Majestad?

─ Te estoy dando una orden ahora mismo. Lleva al cachorro a Rilu, ahora, Jesfe.

Jesfe hizo una reverencia. ─ Lo siento Majestad. ─ Rápidamente caminó con Louis. En toda su vida, nunca había presenciado ese lado salvaje en los ojos de Harry. Sus pupilas, el tono verde... todo estaba en un estado salvaje.

─ Rápidamente, dije, Jesfe.

A lo lejos, escuchó su voz ronca. Sintiéndose como un débil gato al lado de un tigre, puso a Louis en su espalda. ─ Sostente fuerte, Lou. ─ Tomando impulso, corrió hasta dar un salto en su forma de lobo, regresó para tomar entre sus colmillos su ropa y siguió su camino, así, en segundos desapareció entre los árboles.

Aferrado al pelaje de Jesfe, Louis seguía pensando en dos cosas. Eran pequeñas cosas las de hoy, pero había sentido algo que nunca antes. Tenía dudas y preguntas que hacerle a Harry.

Tu'ub ~𝑂𝑚𝑒𝑔𝑎𝑣𝑒𝑟𝑠𝑒~ 𝐿𝒮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora