Capítulo 20.

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Mangel estaba intentando dormir por cuarta vez desde que terminó la transmisión. Me dolía la cara, el pecho luego de golpearme fue por Tobías y cortó la transmisión. No sabía cuánto tiempo paso.

—Como fuiste muy bueno, Gonzalo— su voz se escuchó en las escaleras pero no levanté la mirada— puedes tener a cualquiera de ellos.

—Te quiero a ti, Antonio y Mangel, son los más lindos.

—Pero Tobías también es tierno pero bueno.

Escuché unos pasos aproximándose, y me llevaron a la habitación con Antonio. Los dos tocaron mí cuerpo, Gonzalo me daba miedo pero estaba tan cansado físicamente que no pude luchar, simplemente lloré.

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Rubén estaba decidido con lo que iba a hacer, Lucas le ayudo a buscar sus cosas ese mismo día. Ahora estábamos en su departamento, esperando el mensaje de Beatriz. Me dolía la nariz por la cantidad de veces que me la limpie.

Me aterrorizaba no poder hacer bien las cosas, él me ayudó en tantas cosas y creo que es hora de devolverle el favor. Mi pierna no paraba de moverme mientras mordía mis uñas, Lucas estaba igual.

—¿Estás seguro que quieres hacer esto solo?

—Estoy seguro, tengo que— mire hacía la ventana, ya era de noche, tenía menos de 24hs para ver a Mangel con vida.

—Yo podría ir, podemos hacer un plan, aparte necesito también agarrar a Tobías.

—¿Lo vas a meter en la cárcel por más que este secuestrado?— lo mire.

—Asi funciona esto, lo siento Rub.

No dije nada más porque sentí que mí celular vibro, lo agarre y era un mensaje de un número desconocido. Ya sabía quién era.

—Ya me pasó la dirección.

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Beatriz estaba muy feliz que no pudo ni dormir. Me senté en la cama y aprecie el hermoso cuerpo de Gonzalo. Mí mano acaricio su pecho y él me sonrió aún con los ojos cerrados.

—Buenos días, hoy es tu gran día— me agarró de la cintura e hizo que me siente sobre su regazo, sintiendo su pene en mí culo.

Reí— ¿Vas a ayudarme a matarlos a todos? Quiero que sea perfecto.

—¿Quieres matar a los otros? ¿Oscar, Diego e Ignacio?

—Obvio, cada cosa lo mato para evitar problemas.

—¿A mí me vas a matar?— me acaricio la mejilla.

—Si sigues portando bien, dudo que te mate— empecé a mover mis caderas— podemos ser la pareja de asesinos, en plan, Sr. Y Sra. Smith.

Se mordió suavemente el labio— me agrada la idea. Me haces excitar demasiado.

—BEATRIIIZ, PUEDES CORTARME EL PENE— se rió.

—Lo voy a matar— suspiré, tratando de relajar mí ira.

Me levanté de la cama, recibí un chasquido de lengua por parte de Gonzalo. Busque ropa decente, en pocas horas iba a enloquecer toda Madrid e incluso todo el mundo ¿Qué más puedo pedir? Era algo muy hermoso mí plan, Rubius aparecerá antes de que mate a Mangel y se va a demostrar tan débil, no sabe que despertó del coma. Hará lo que sea para poder tener a su noviecito cerca.

Nada puede fallar en día de hoy. Me puse a imaginar muchos escenarios por si llega a pasar y como resolverlo. Que estrés.

—Voy a salir a matar gente, tú, vigila que ninguno escape, aún los necesito.

Déjanos- rubelangel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora