-¿Puedo acompañarte a tu casa?- soltó la pregunta.
Después de lo que ahora se había vuelto un día común con la constante presencia de Sasuke, Naruto estaba listo para irse a casa.
Literalmente había cortado la plática forzosamente debido a que llevaban charlando quince minutos en la entrada de la escuela.
Así que aquella pregunta lo tomó por sorpresa y a su vez ya la sentía llegar.
"No". ¿Por qué? Ni él sabe, pero no está listo para tener a Sasuke cerca de su hogar.
-Eehm- se rascó la nuca con nerviosismo, sin mirarlo directo a los ojos.
-No te preocupes, entiendo- le sonrió comprensivo, dejándolo marchar con un gesto suave a modo de despedida.
Naruto se mantuvo todo el camino pensativo. Aún por la noche sucumbido en el silencio de su habitación sólo observaba el techo de su habitación. Y cuando la desición llegó junto a una idea, sonrió soñador como sólo la felicidad podía provocar.
Al día siguiente se duchó, desayunó y despidió de sus tutores con tal alegría que la pareja de adultos sólo pudo mirarse con complicidad y una sonrisa juguetona adornando sus labios.
-Ese mocoso...
-Nuestro mocoso.
Por su lado, Naruto caminaba con alegría y nervios por igual.
A pocos minutos logró visualizar la entrada del instituto, donde como siempre lo esperaba Sasuke con su obsequio en manos, haciendo sonreír seguro de aquello decidió sería otra gran pasó.
Pasó el día de clases, con ahora las pequeñas charlas entre los dos, aún había veces que se cortaban de golpe por causa de Sasuke pero Naruto decidió dejar de darle mucha importancia a eso, aún sintiera curiosidad por esa discreta mueca de dolor.
Durante el almuerzo, había veces que le insistía en dar un bocado a algún alimento, y aún Sasuke se resistiera mínimamente, se sobre-esforzaba por no decepcionarlo, aún al comer tan sólo un poco saliera corriendo sin dar explicaciones.
Entonces la tarde llegó, el momento de separarse como en cada finalización del horario de clase. Pero Sasuke nunca se esperó ser tomado de la muñeca y ser arrastrado por un camino distinto a su casa.
-¿A dónde vamos?
-¿No tienes tiempo?- recibió en respuesta.
-¡Claro!- respondió de inmediato -O sea, digo, si, tiempo tengo, si, lo tengo, el tiempo... lo tengo, si.
Naruto alzó una ceja ante ese sinsentido y soltó una pequeña carcajada.
-Por su puesto, eso esperaba- le sonrió cálido. Siguió caminando a su lado sin soltar la muñeca ajena.
-Entonces... ¿A dónde vamos?
-Por ahí.
-¿Por ahí?
-¿Mmmh, qué tal al parque, eh?- preguntó tanteando sus palabras, no le confirmaba nada, sólo pedía su opinión.
Sasuke tardó en procesar lo que significaba exactamente esas palabras y cuando lo hizo rió alegre y confirmó.
-Al parque estaría super.
Y no tardaron llegar. Y menos tardaron subirse a los juegos aún fuera una travesura por su edad.
Naruto empujando a Sasuke del tobogán y Sasuke llevándoselo de la solapa por los nervios.
Naruto haciéndole cosquillas a Sasuke en el pasamanos aún sus pies ahora quedaban a menos de tres centímetros del suelo.
Sasuke obedeciendo a Naruto en el subibaja, si Naruto quería estar arriba lo estaba, si quería subir a Sasuke, lo subía, el pelinegro no renegaba nada.
Naruto vomitando al bajar de aquel juego que ellos mismos hacían girar. Y Sasuke alterado por su malestar.
Se subieron de nuevo a aquella torre que se unía a otra a través de un gran tubo de plástico duro, en el que se quedaron tirados uno al lado del otro aún fuera justo de su tamaño y se les asomaran los pies que movían con diversión, distraídos sin nada más que hacer que disfrutar de la cercanía del otro.
La regla de no tocar había desaparecido ese mismo día por la misma mano de Naruto, y eso no podía sentirse más que bien.
-...pero cuando les digo que preferiría estudiar arte o botánica dicen que eso ni siquiera es un estudio, que no hay trabajo de eso.
-Actualmente no hay trabajo de nada.
-¡¿Verdad?!- gritó diversión -Eso mismo pienso, prefiero gastar mi juventud en algo que amo a algo que ni me interesa si de igual forma en ambas voy a andar mendigando trabajo mal pagado.
-Yo te pagaría bien.
-No voy a ser tu jardinero en tu gran mansión, niño rico.
-No... yo te pagaría solo por tenerte a mi lado.
-¿Prostituta?- le miró pensativo -Gran consideración, no lo había pensado- dijo con un pulgar en su mentón.
-¡No!- gritó con el rostro ardiendo en rojo. -No hablaba de eso, hablaba de manera bonita no pervertida.
Naruto no pudo evitar reírse por tal elección de palabras tan poco comunes en Sasuke.
-Bueno, de manera "bonita" podría pintarte día tras día para que me puedas pagar por eso, así matamos dos pájaros de un tiro.
-Mmh.. me gusta.
-A mí me gus- ¡Agh!
Pero sus palabras fueron interrumpidas cuando un niño pateó la cabeza de Naruto, haciéndolo levantarse y golpear su cabeza contra el plástico del juego.
-Auh, maldición- sobó su cabeza doblemente golpeadaz soltando lagrimitas dramáticas.
-¿Qué te pasa, maldito engendro?- Sasuke enseguida se puso alerta, saliendo del juego para atacar al niño que salió corriendo ante la inminente amenaza.
Sasuke lo atrapó justo cuando estaba intentando bajar de aquel juego por unas escaleras abstractas.
El niño lo miró con miedo, pero antes de nada, fue jalado bruscamente por el rubio y lanzado sin cuidado por un tobogán cercano.
-Estaba a punto de ponerlo en su lugar- reprochó cruzando los brazos con resignación.
-Es un niño, mal educado pero un niño al fin y al cabo.
-Se lo merecía...- dijo resistiendo el dolor de cabeza punzante que apareció.
-Sabes que odio la violencia, y más cuando es hecha de manera injusta, así que no te iba a permitir algo así.
-Mnh- Sasuke sólo hizo un mohín y no agregó más, desapareciendo el dolor.
Naruto bajó la mirada ante esos ojos negros y brillosos.
"¿Seré hipócrita?" pensó con dolor.
-Mejor vayamos a casa.
-¿A tu casa?- pareció brillar en un segundo.
-Cada quién a la suya, es tarde.
-Bien.
Bajaron acostados por un tobogán, riendo al ver lo erizado que se puso su cabello por la electricidad.
En la entrada del parque cada uno siguió su rumbo y Naruto sintió una punzada de preocupación al darle la espalda.
Todo estaba yendo bien, así que decidió ignorar el repentino presentimiento incoherente.
•
Estamos en la brecha final, ojito 👀
/Matching Date/
Vk~
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Muñeco vudú || NSN
Hayran KurguHinata siempre amó a Naruto, y con más capricho que amor, descubrió una forma de robar el amor de Naruto para al fin obtener una respuesta afirmativa a sus sentimientos Pero una interrupción y un paso mal dado, logrará causar dolor en Naruto al ser...