— Se suponía que iría a prisión — intervino Parra.
— Lo mataste... — Philip hizo a Valeria recargar la espalda en la silla — y, ¿te quedaste su puesto?
— Creé una nueva vacante, y yo la ocupé. Las Almas me necesita.
— Las Almas busca soldados, no sicarios. Pero tú... — el coronel se agachó a la altura de Valeria — deshonras al ejército — miró a Rudy para luego volver a mirar a Valeria —. Y a tus hermanos, ¿no?
Alejandro se enderezó y hubieron unos segundos de silencio, silencio el cual rompió Graves.
— ¿Por qué haces esto?
— Dímelo tú — la narco lo miró —. Tú tienes el contrato, ¿no? Si no lo haces la competencia lo hará.
— Eres una narco y refugias un terrorista — Ghost entró en escena.
— El terrorismo es bueno para el negocio, es un seguro.
Fernanda frunció los labios al comprender lo que quiso decir la pelicorta. Y es que era verdad.
— ¿Qué carajos significa eso? — preguntó Alejandro al no comprender a Garza.
— ¿¡Te puedes sacar la puta cabeza del culo por un segundo!? ¡Puta madre, Alejandro!
Philip se vio obligado a hacer a Valeria sentarse cuando vio que casi se levanta. Ella movió el hombro por el cual Graves le impedía levantarse. Garza y Vargas se miraron fijamente. Parecía que se querían matar.
— Mientras haya guerra contra el terror, no habrá guerra contra las drogas — se inclinó ligeramente hacia adelante, mirando a Alejandro —. Para encontrar a lo que llamas terrorista y tus misiles necesitas de mí. Para evitar la violencia.
— No seré parte de esto — Alejandro tomó su arma, dispuesto a irse.
— Eso no cambia las cosas — Soap trató de aligerar el ambiente.
— ¡Lo cambia todo! ¡Carajo! — antes de salir por la puerta, miró atrás — No hagan tratos con ella, no saldrá bien.
Y sin más, Vargas salió del contenedor. Fernanda suspiró y frunció los labios para luego comenzar a caminar hacia la salida también con el propósito de ir a intentar calmarlo.
— Oye, güerita — la teniente detuvo su paso al oír a Valeria llamándola —. ¿Tú eres la nueva conquista de Alejandro? ¿Vas a consolar al güerito y hacer tu deber como su parejita? — su tono era burlón.
— Voy a fingir que no escuché eso — no mostró nada más que seriedad en su voz, y acto seguido, continuó su camino hasta salir de ahí.
Luego de buscar a Alejandro con la mirada, lo vio sentado en un banco de la base, resoplando de rabia.
Sin dudar, Fernanda se acercó a él para luego sentarse a su lado sin decir nada y mirando al horizonte, igual que él.
— Ella... — comenzó a hablar — ella lo lastimó, ¿cierto, coronel?
No hubo respuesta por parte del mexicano, cosa que le dejó bien clarito a Fernanda que ella estaba en lo cierto.
— Mire, sé que lo afecta, pero... — suspiró antes de continuar — no deje que lo haga ahora. Usted es fuerte, demuéstrelo — sin respuesta —. Sé que puede, señor.
Alejandro miró de reojo su hombro cuando sintió la mano de Gallardo en este y lo miró, tratando de consolarlo. Extrañamente se sintió bien.
— El tema es delicado, teniente — habló el mexicano —. Dudo que lo entienda.
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La novia del coronel 『Alejandro Vargas』
FanficFernanda Gallardo, una teniente española, fue plantada en el altar y humillada frente a media ciudad en España, jurándose a sí misma que nunca volvería a confiar en el amor. Pero diez largos años después, el coronel Alejandro Vargas llegó a su vida...