UNA NUEVA OPORTUNIDAD

Las acciones dicen más que mil palabras.

- Je, si vienes a pelear por favor sal de mi habitación... estoy cansada.- dije cerrando los ojos para relajarme.

- Vine a pedirte disculpas, sé que me excedí por cómo te traté hace rato, pero debes entender que ese bebé no tiene la culpa de lo irresponsables que fueron sus padres. Por lo mismo no lo puedes abandonar a su suerte con cualquier persona, no sabes cómo lo tratarán en un futuro.

- Sí, lo sé. Por lo mismo he tomado una decisión, quiero que tú te hagas cargo de él, quiero que seas el padre de este bebé. Sé que contigo estará mejor que conmigo además así siempre estaré presente en su vida como tía.- Je me miró con cara de asombro y luego ternura. Palmeo la cama a su lado para que yo me acostara, le hice caso y me recosté a su lado mirándolo de frente.

- ay hermanita, creo que a lo largo de tu embarazo empezarás a encariñarte con ese bebé, verás cómo crecerá tu panza, sentirás sus movimientos y luego no querrás alejarte de él.

- No creo, no estoy hecha para ser madre... aún quiero terminar mis estudios, vivir mi juventud.

- Bueno si no te arrepientes cuando nazca, créeme que quedará en buenas manos y que lo criaré como si fuese mi hijo.

- Gracias Je, gracias por hacer todo esto... 

- Tranquila, en lo que pueda apoyarte lo haré. Pero antes de que se me olvide, mamá quiere llevarte a su ginecólogo mañana, y yo me preguntaba mmm... ¿Puedo ir?- bueno y para que decir que me emocioné hasta las lágrimas, mi hermano, que se haría cargo de mi bebé aceptándolo como su hijo me pide  ir al primer control.

- Por supuesto, además quiero que estés ahí.

- Gracias hermanita, ahora a dormir que mañana debemos levantarnos temprano.- dijo haciéndome cariño en el cabello y con el otro brazo abrazándome igual como cuando era pequeña.

Caí rendida a los brazos de Morfeo (Dios del sueño) fue como un abrir y cerrar de ojos, al despertar Je ya no estaba a mi lado (Seguramente al dormirme se fue a su habitación) la luz inundaba mi habitación, con todo el ajetreo de ayer olvidé cerrar las cortinas.

Me levanté con las típicas nauseas matutinas, estoy bastante nerviosa por el control de hoy aunque según mis cuentas debo tener 1 mes de embarazo... un mes desde que tuve relaciones con Rodrigo, me pregunto a quién se parecerá este bebé, él es alto (mide 1.79 aprox.) y fornido de pelo negro y tez clara, ojos azul claro. Mientras yo soy bajita (mido 1.65), pelo café claro, ojos color miel y piel  trigueña. Espero se parezca a mí, así tendrá cierto parecido a Je. Él es alto (1.85) tiene la piel trigueña al igual que yo, sus ojos son color verde intenso y tiene el pelo café oscuro. Tiene facciones parecidas a mí.

-Chloé, ¿Despertaste?- dijo entrando mi madre a mi cuarto.

- Sí, estaba pensando. ¿A que hora es la cita con el doctor?- Pregunté más ansiosa de lo necesario.

- Es a las 11.30, así que levántate y arréglate. El desayuno ya está listo en la cocina. 

-Ok, me ducho, visto y bajo.

Después de desayunar, partimos al ginecólogo me hicieron una ecografía. El doctor dijo que todo estaba normal me recetó vitaminas, fierro y otras cosas que no recuerdo me confirmo la edad gestacional que es de 4 semanas (1 mes) y me dijo que la fecha probable de parto sería el 29 junio. Pero que eso dependía de como siguiera mi embarazo, si es que sería parto normal o cesárea.- Yo solo escuchar la palabra parto sentí como se drenó todo el color de mi cara y comenzaba a marearme. Me citaron para 1 mes más y me dijeron que los 3 primeros meses eran medios complejos. 

Y así fueron pasando los días y los meses a partir de los 3 meses y medio pude sentir como la criatura que crecía en mi comenzaba a moverse. Era como sentir un cosquilleo por dentro había crecido un bulto pequeño en mi vientre y las náuseas ya no estaban presente como antes.

5 Meses y medio...

Y ahí estábamos los tres sentados (Je, mi madre y yo) esperando mi turno en la consulta  del ginecólogo, el doctor Sánchez hoy si teníamos suerte sabríamos el sexo del bebé. Y es que la revisión pasada bebé no quiso mostrarse y ya estoy un poco cansada de llamarlo bebé o simplemente pequeñín. Quiero llamarlo o llamarla por su nombre (Matías Ignacio si es niño y Sophie Isidora si es niña) 

- Chloé ya puedes pasar.- la secretaria del doctor era bastante simpática, nos guío hasta la consulta para luego retirarse.

- Buenas tardes doc.- estiré mi mano a modo de saludo, él la estrecho amablemente 

-Buenas tardes, tomen asiento por favor.- fue ahí cuando me di cuenta que mi madre y mi hermano habían entrado conmigo.

- Bueno doctor, no alarguemos esto más de lo necesario, queremos saber pronto.- dije levantándome de mi asiento y caminando hacia la camilla donde me realizan comúnmente las ecografías.

- Quien te viera y quien te ve, ¿Ansiosa por saber el sexo?- preguntó por lo bajo mi hermano

- Sí, quiero dejar de llamarlo bebé. Y bueno es cierto, día a día me he encariñado, desde que empezó a crecer en mí,  cuando comencé a sentir que se movía. Y cómo olvidar el primer día que escuche sus latidos. Fue una experiencia única, una experiencia que quiero vivir a su lado. Quiero ser lo que este bebé necesite, quiero ser su madre, lo mejor para él.

- Estoy orgullosa de ti hija, siempre supe que recapacitarías... Serás una gran mamá.- guaaaau es primera vez que acepto que amo a esta criatura delante de otra persona que no sea Rocío. 

- Sí, también estoy orgulloso yo te apoyaré siempre... te prometo que seré el mejor tío del mundo.

- Gracias, a los dos. Pero ahora quiero saber que será mi bebé... 

-Sí doc. queremos saber si será princesa o campeón.- Je dijo con mucho entusiasmo.

El doctor, me hizo recostarme en la camilla, subirme la camiseta y me aplicó el gel. Me estremecí al sentir lo frío que estaba este. Después de que pasara la maquina desparramando el gel por mi vientre habló.

-Bueno a lo que vamos, será... una princesa.

-¡Sí!, te gané mamá. Te toca comprarle la cuna a mi princesita.- Je, había apostado que sería niña con mi madre que decía que era niño, el que perdía debía comprarle la cuna al bebé.

- Serás una hermosa princesa Sophie Isidora.- dije acariciando mi vientre abultado que ya se lograba notar. Menos de espalda, el que me veía de espalda no notaba mi embarazo hasta que yo me daba vuelta, así sorprendí a bastantes conocidos al verlos. 

Después de dejar agendado mi próximo control con el doctor mi madre decidió que era momento de cumplirme un antojo así que partimos a la heladería favorita de mamá "Do Sabores". Al llegar allá como yo no estaba segura que pedir Je y mi madre me hicieron ir a la vitrina de los helados, estaba tan entusiasmada y babeando por ellos que no me dí cuenta de quien se acercaba.

-Chloé, ¿eres tú?.- dijo esa voz reconocida detrás mío, quedé helada al escucharlo.