𝚗𝚊𝚞𝚐𝚑𝚝𝚢 𝚐𝚒𝚛𝚕; young miko

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Martina había regresado de su cuarto. Tenía puesto su pijama de verano que consistía en un top corto blanco y unos shorts negros que dejaban a la vista su lindo abdomen

Con su niñera, estuvieron un rato viendo películas de acción sentadas en un sofá del salón con las luces apagadas

-Lo normal es que a mí no me gusten la movies de acción -objetó Martina- pero esta ta buena.

-¿En serio? -cuestionó la tatuada- ¿entonces la princesa quiere ver la jungla de vidrio 3?

La rubia abrió los ojos sorprendida

-¿Hay otra? -preguntó- genial, porque menudo final

-Sí, son cinco movies en total, cariño -respondió Victoria- ¿quieres ver la siguiente?

-¡Claro que sí! ¡Pon la siguiente right know!

La tatuada sonrió ante la insistencia de Martina. Al parecer, si había sido buena idea ver películas con ella, no solo porque ya de por sí le gustaba estar con ella, sino que también podía conocer más sus gustos

-Sí, mi capitana -decretó la tatuada guiñando un ojo

La rubia soltó un suspiro agotador

-No hagas eso, Maria Victoria -protestó- no vuelvas a guiñarme un ojo, plis

Victoria no sabía a qué se refería con que no le guiñara el ojo, pero fingió que no escuchó tal petición y puso la movie en la tele para desconectar un poquito

-Ni sé a qué te refieres pero... -dijo con una sonrisa- ¡ahora toca ver a la' persona' morir!

...

Al día siguiente, cuando salió el sol, las chicas se quedaron dormidas en el sofá una encima de la otra. Dando a entender que no habían llegado a terminar de ver las pelis

Victoria fue la primera en abrir los ojos. Aún seguía estando cansada por lo del viaje escolar, y esas horas que estuvo durmiendo, al menos pudo descansar

Cuando se quedó sentada, terminó de abrir sus ojos dándose cuenta de que delante suyo tenía poderosa vista de la que todos matarían por ser espectadores

"No se lo mires, no le mires el culo" se decía a sí misma, pero no pudo evitar tal tentación tan fuerte que no dejaba de sentir.

Pero antes de que pudiera hacer algo más, sintió como su móvil vibraba haciendo que se levante del sofá para atender la llamada. Que justo era su novia

-Ay, hola mi amor... Ehm, sí yo también te extraño. ¿Puedo llamarte en otro momento?

Mientras que la tatuada estaba hablando con su chica, Martina abrió un poco los ojos mientras intentaba despertarse estando un poco cansada por el viaje escolar

-Genial, gracias my girl -dijo Victoria antes de colgar- Ehm, yo...

-Está bien, Vicky -expresó la rubia- no te preocupes

-No, no está bien

-Te he dicho que no pasa nada -objetó Martina- Dormirnos juntas fue completamente platónico. Y claro que no ocurrió nada raro.

Las chicas se sonrieron

-¿En verda' cree' que ha sido platónico? -cuestionó la tatuada