Sophie Leclerc de 20 años, nacida en Mónaco.
Hermana menor de el famoso piloto monagesco Charles Leclerc de F1 y Arthur Leclerc de F2. Consentida, berrinchuda y caprichosa. Los hermanos se encargaron de darle todo el amor que su padre al fallecer no...
Comienzo de temporada, oficialmente vivía en mi departamento y aunque Arthur de vez en cuando se topaba con Carlos, lo ignoraba. Yo le rogaba a Arthur que me entendiera y aunque a veces creo que lo intentaba no era así.
Me habían mandado a llamar a Maranello para la presentación del monoplaza, Arthur era piloto reserva de Ferrari y Antonio se había ido a Red Bull porque obviamente le ofrecían más. Me dejo sola, ya me había acostumbrado a él. Llegue con mis hermanos por cada costado, y solo ví a lo lejos a Carlos platicar animadamente con Ollie, solo que este al verme corrió a abrazarme.
- ¿Cómo has estado pequeña Sophie? – pregunto, y saludo a mis hermanos.
- Bien, y ¿tú? Oye que ya tienes novia ¡he! – mencione picando su costilla.
- Bueno vamos, que nos esperan – menciono Carlos.
Me quede atrás platicando con Ollie, mencionaba que había una chica nueva para ayudarme. Por fin ya no era la novata, aunque yo prefería quedarme sola.
- Mira es ella. Ahora debo irme – menciono Ollie dejando un beso en mi mejilla, el cual trono y Carlos me miro
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Tome mis juntas de todas las mañanas, recibiendo instrucciones y mencionando que efectivamente la novata se llamaba Ashley Climart estadounidense bastante atractiva para mí parecer. Estaba enseñándole a la oficina, cuando tenía necesidades de mujer.
- Dame un momento, vuelvo ¿sí?
- Claro,
Sali de la oficina, que por cierto estaba cerca de la cosa que Carlos y Charles llamaban oficina. Iba caminando al sanitario cuando sentí una mano pesada jalándome.
- Hey! Idio… mi vida ¿Qué pasa? – pregunte sonriéndole a Carlos
- ¿Qué te traes con el niño oso?
- Nada ¿Por qué? – pregunte acomodando su cabello
- Ese beso, ¿fue nada?
- Carlos bebé Sainz esta celoso he! – dije riendo
- No, para nada solo quiero que tomes distancia con él.
- Claro que no, es mi amigo. No pasa nada con niño oso.
- Entonces hazle saber que tienes novio – menciono jalando mi cintura para plantarme un beso.
Les juro, estaba yo disfrutando tanto de sus labios sobre los míos. Jugando con su cabello, cuando escuchamos que alguien grito.
- ¡ASCO SOPHIE! – grito Arthur.
Y vimos que salieron varios de su oficina. Y yo solo mire a Arthur mal. Esté haciendo un escándalo de algo que ya sabía.
- Arthur. Ven acá – dije jalándolo.
- No pasa nada, sigan en lo suyo. – menciono Carlos
Lo metí a la oficina o cosa esa que tenían Carlos y Charles.
