⭐ 33 : No es suficiente

366 46 6
                                    

— ¿Ya puedo salir a verla? — pregunto a Han por milesima vez mientras agitaba al menor.

— Pues en realidad aún no puedes... — mascullo Han en cuanto el mayor dejó de agitarlo.

— ¡Noooooo! ¿Por qué? — lloriqueo Hyunjin volviendo a agitar a Han — ¡Escribi la canción para ella e hice todo esto para verla! ¡¿Por qué no puedo verla?! ¡Dame una razón!

— Pues te daré dos razones — apartó las manos de Hyunjin de sus hombros —. Uno: porque ella aún no sabe que la canción es para ella. Dos: si vas y alguien te reconoce empezarán a molestarla.

Hyunjin se quedó callado con un puchero y cara de disgusto.

Tres días habían pasado desde que habían publicado la canción y lidiado con las consecuencias, sin embargo para Hyunjin parecía que había pasado una eternidad sin ver a Mi-so.

Pero Han tenía razón, era muy probable que todo se complicará si la iba a ver.

Aun así no podía evitar querer ir para poder abrazarla luego de aquella complicada semana.

— ¿Y no podrias ayudarme a encontrarme con ella como la otra vez? — pidió — Realmente quiero verla.

Han soltó un resoplido con frustración pero luego de un segundo asintió con la cabeza, provocando que Hyunjin diera un asalto de emoción.

— Lo intentaré — saco su teléfono y Hyunjin se asomo a este para mirar que era lo que hacía.

Entraba al contacto de Mi-so, el cual tenía una pequeña estrella junto a su nombre.

— ¿Te mensajes con Mi-so sin que yo sepa? — le recriminó Hyunjin volteandolo a ver.

— Nunca crei necesario decírtelo — repuso Han con una sonrisa.

Hyunjin le lanzó una mala mirada y Han comenzo a reír.

— ¡Ey! ¡No te enojes! — soltó una carcajada — En realidad sólo le he mandado mensaje para que pudieras encontrarte con ella la vez pasada.

— Más te vale, pequeña sabandija — masculino Hyunjin entrecerrado los ojos.

Observo como Han le enviaba mensajes a la chica, armando una estrategia en su cabeza, casi podía ver ver los engranes girar en esta. Rápidamente, como pensando en un buen plan.

Han levantaba la cabeza de vez en cuando, fruncia el ceño y los labios, para luego volver a escribir.

Finalmente soltó el teléfono y se volvió hacia él.

— Listo — canturreo —. Volví a resolver todo, más te vale pagarmelo de una buena manera.

— ¡Bien, bien! Pero, ¿que te dijo? — se impaciento Hyunjin dando algunos saltos en su lugar.

— Debes ir al café mañana temprano — explicó el chico —. No hay muchas personas, pero debe estar tener cuidado, yo te llevaré en uno de los autos de la empresa y pasaré a recogerte también.

— ¿No llamaremos mucho la atención con eso? — pregunto Hyunjin ladeando la cabeza.

— Para nada, más llamara la atención ver a un tipo todo cubierto escabullirse para entrar a un café — repuso Han.

— Bien, ya entiendo el punto — suspiro —. Gracias.

— No hay de que — lo apuntó con un dedo —. ¡Hoy hay que ver "El Castillo Ambulante"!

— ¡Pero esa ya la hemos visto cinco veces! — se quejó Hyunjin.

— Pues la habremos visto seis

☆Star Love☆| Hwang Hyunjin y Tu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora