⭐ 35 : Chico poemas

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— Su pastel señor Hwang — le sonrió Mi-so tendiendole el postre.

— Gracias estrellita — su panza volvió a gruñir —. Me moría de hambre.

— ¿Siquiera desayunaste? — pregunto Mi-so volviendo a sentarse a su lado.

— No realmente — repuso Hyunjin tomando una cucharada de pastel y llevándosela a la boca —. Tome un café americano porque anoche me desvele pero fuera de eso no comí nada.

Se había desvelado de la emoción, no había podido dormir causa a imaginar cómo estaría la chica.

Mi-so detuvo la siguiente cucharada de pastel y lo miro con el ceño fruncido.

— ¿Qué? — pregunto Hyunjin tratando de alcabzar el pastel.

— Esto no es un buen desayuno — mascullo —. Debes alimentarte bien.

— Así estoy bastante bien, gracias — repuso Hyunjin tratando de comer el pastel que le restaba.

— No — dijo tajante Mi-so.

Se levantó y se llevó su pastel al mostrador.

— Saldré con Hyunjin — le dijo a Young-Soo —. Volveré luego de que coma algo.

Young-Soo rodo los ojos pero asintió con una sonrisa. Mi-so se volvió hacia él con paso decidido.

— Arriba — le dijo tomándolo del brazo — debes desayunar algo.

— ¡Pero así estoy bien! — lloriqueo Hyunjin.

Aun así se levantó y la chica lo jalo fuera de la tienda. Una vez ahí se giro hacia él y tomado el gorro y el cubrebocas que Hyunjin había dejado en la mesa del café, comenzo a cubrirlo.

— No deben reconocerte — le dijo mientras le acomodaba el gorro que le había pedido prestado a Han.

— Nadie me reconocerá — repuso mirando a la chica con una sonrisa.

— Debes de ocultarte bien — le colocó el cubrebocas y al final sonrió asistiendo con la cabeza. — Asi esta mejor — sonrió —. Ahora sígueme, iremos a mi lugar favorito para desayunar.

— ¡Woaah! ¡Veremos el Mi-so desayuno! — exclamó Hyunjin caminando al lado de la chica mientras sonreía alegremente.

Realmente le alegraba el corazón volver a ver a Mi-so, en especial luego de una catástrofe como la que había causado días anteriores.

Verla tan linda y brillante como siempre le hacía recordar que a pesar de los tiempos malos siempre podia volver la luz.

Camino a su lado sin que nadie le prestará atención, era como si solo ella pudiera verlo en aquel momento. Se sentía realmente seguro estar a su lado.

Finalmente llegaron a una bonita tienda, era de colores cafes, con algunas plantitas dentro y fuera que le daban un aspecto más acogedor al lugar. Era amplio y con grandes ventanas por lo que parecía realmente lindo.

— ¿Es aquí? — pregunto Hyunjin demostrando su emoción por entrar al lugar.

— Si — señalo la puerta de la entrada —. Vamos, entra.

Hyunjin lo hizo entre saltos de emoción y Mi-so lo siguió de cerca riendo con la reacción del chico.

Se sentaron en una de las mesas junto a la ventana y Hyunjin miro alrededor con emoción. Todo parecía elegante y comodo a la vez.

— ¡Que lindo lugar! — exclamó con una sonrisa.

— ¿Te gusta? — Hyunjin asintió  repetidamente — Pues te gustara aun más la comida que traerán.

☆Star Love☆| Hwang Hyunjin y Tu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora