3. ¿Quién Eres Tú?

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♤♠︎ Los cambios son retos que abren la puerta a nuevas oportunidades ♠︎♤

Lo miro sin esperar esa repuesta de él, su rostro sigue igual de serio, sin embargo, sus ojos transmiten tanta calidez que es imposible no perderme en ellos.

—¿Disculpa?

—Quiero darte trabajo, Isabella.

—Me conociste de la peor manera, luego te mentí en donde vivía y estas aquí ¿ofreciendo me un trabajo?

Realmente no entendía ¿Qué quería de mí?

Hudson no cambio su expresión, por un momento pienso que es como una piedra.

—Tuviste tus razones, eso no te hace ser menos.

—Te lo agradezco —digo, mi voz sonando temblorosa, estoy muy sensible aún y es mejor callarme y sentirme afortunada.

—Bien, quiero que sea niñera de Zoe, mi hija.

Abro los ojos sorprendida ¿Una niña? ¿Su hija? que tonta, seguro tiene esposa... familia.

—¿Cuánto años tiene la pequeña? —ruego que no sea una adolescente.

—Cuatro años, en estos momentos anda de viaje con su abuela, debe de llegar dentro de unos días ¿aceptas el trabajo?

—Sí, estaría encanta —sonrió ampliamente y las ganas de abrazarlo es muy grande, pero algo me dice que él no se sentiría muy cómodo.

—Perfecto, como no tienes hogar, vivirás aquí, tendrás comida, tu dormitorio y un salario.

—¡Oh por Dios! eso es mucho. Me está pagando más de lo que debería.

—Es una niña muy hiperactiva, curiosa y muy inteligente para su edad, te aseguro que te dará mucho trabajo. —Recoge los platos y se levanta, hago lo mismo alcanzándolo.

—Por supuesto que no, yo lo limpió. —Le quito la esponja de fregar y el plato, él levanta una ceja y luego asiente.

—Empezará el colegio este lunes, está muy emocionada. No estoy mucho en casa por mi trabajo así que necesito alguien que esté en toda su disposición.

—Entiendo, —aseguro, terminando de lavar el ultimo plato

—Si que eres rápida —dice mientras mira todos los platos limpios.

—Estoy acostumbrada, es lo que hacía antes. —Me encojo de hombros restándole importancia.

Él abres sus labios para decir algo, luego los cierra arrepintiéndose, sé lo que quiere preguntar, pero entre menos sepa de mi pasado mucho mejor, ya sabe cosas vergonzosas de mí.

—Que tengas buena noche, Isabella.

—Igualmente para ti y nuevamente gracias jamás dejaré de hacerlo.

Él me contempla fijamente por unos segundos que me resulta incomodo, luego asiente y se va.

Me sirvo agua, después me dirijo a la habitación, ya me siento como si fuera mi hogar.

«No abuses Isa» me recuerdo

Al fin en una cama limpia y con olor a suavizante, me acuesto dando vueltas y riendo como una niña, se siente maravilloso.

Tengo mucha curiosidad conocer a la pequeña Zoe y también a la esposa de Hudson espero que no se moleste y me eche de esta casa...

.

Me despierto muy temprano he dormido tan bien que me levanto con una energía como nunca lo he tenido, voy al baño me aseo y luego a la cocina, la casa esta en total silencio, tal vez aún no se ha levantado Hudson porque la cocina esta como se dejó en la noche.

Dulce Obsesión Donde viven las historias. Descúbrelo ahora