My Piece Of Star - Carla Autero

C29. Visita de la presi

Narrador Omnisciente

Casi dos semanas después, las cosas entre Giro y Carla iban bastante bien, se veían a diario para los entrenamientos de PIO, Carla la acompañaba a los entrenos del Barca y siempre que podía inventaba alguna excusa para salir de casa e ir con Giro. El equipo se alegró mucho cuando se enteraron de que ya era oficial, (oficial a escondidas de los padres de Autero), pero no para el resto del mundo.

La semana siguiente PIO se enfrentó al Barrio y después de haber salido con el marcador empatado 1-1, se llevaron los dos puntos en la tanda de shootouts 3-2. Subían cada vez más en la tabla y estaban a punto de colarse en los 4 primeros lugares, listas para saltarse la ronda de octavos y pasar directo a cuartos de final.

Esta semana es especial, Rivers llega a España para ver a sus dos equipos jugar en persona y a conocer a su equipo femenil más allá de una pantalla. Todas estaban emocionadas por tener a su presi en cabina, pero había alguien en específico que estaba más nerviosa de lo que podríamos llamar normal.

Giro: Linda, relájate —dijo, sin quitar la mirada del camino ni las manos del volante.

Autero: No puedo, voy a conocer a Rivers —respondió, moviéndose cómo gusano con sal en el asiento de copiloto, lo que hizo reír a Giro.

Giro: Nunca te vi así de nerviosa

Autero: Porque no me viste el día del draft, cuando entraste al set. Casi me quiebro los dedos de tanto tronarlos

Emma sonrió inconscientemente.

Giro: Y mírate ahora, eres Princess passenger de mi Maserati —Puso su mano sobre la pierna de su novia. Nunca se acostumbrará a llamarla así, ni yo tampoco.

Siguieron el camino hasta llegar al complejo de entrenamientos, donde se encontrarían con la mexicana. El resto del equipo también llegó muy puntal, todas esperando a que Rivers apareciera.

Aitana: ¿Creéis que quiera tirar penalti el sábado? —preguntó.

Miriam: Espero que si, seguro que clava. A que si Emma

Giro: Habrá que verla chutar

Samper apareció, con una persona que medía menos de la mitad que él. De lentes oscuros y cabello medio rubio. Llegó la presi.

Rivers: Hola hola —saludó con una sonrisa.

Nuria: Buenas —Fue la primera en acercarse a abrazarla.

Rivers: Hasta que se me hace conocerlas cabronas —dijo, después de haber saludado a todas las jugadoras— ¿Y mi entrenadora?

Giro: Un gustazo Rivers —Se inclinó un poco para abrazarla. La diferencia de altura era de al menos unos 15 centímetros.

Rivers: No, el gusto es mío. Quien me iba a creer que la estrella del Barca iba a ser la entrenadora que va a sacar campeón a mi equipo

Giro: En eso estamos

Rivers: Bueno y que, ¿vamos a salir a cenar o que?

Mar: Cena PIO con la jefa, claro que si

Autero casi no habló en todo el rato que estuvieron ahí. Giro la miraba cada que podía, asegurándose de que todo estuviera bien, o al menos intentando.

Se organizaron para quedar en la noche e ir a cenar, incluso con los chicos de PIO. No era día de entrenamiento así que todas se fueron a sus casas a prepararse para la noche. Giro llevó a Carla a su casa, cómo siempre, pero su actitud extraña seguía ahí.

Giro: ¿Paso por ti para ir a la cena?

Autero: Ahm no, tal vez llegue un poco tarde. Me iré en taxi

Giro: ¿Taxi? ¿Porque? —preguntó, con el ceño fruncido.— Sabes que no tengo problema en esperarte, cariño