Triple Jaque Mate

Capítulo 17

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Sabrina caminó aplastando el césped con aquellos botines negros bajo sus pies, a un lado iba Peach quien tomaba la mano de su madre con algunos claveles es sus manos, subía sus gafas mientras murmuraba una canción infantiles.

-Y entonces le dije a mi amiga Jee que debía cuidar más de sus zapatos, no está bien que patee los árboles cuando se enoja-Sabrina sonrió acariciando la mano de su hija cuando Peach levantó su vista pudo ver aquellos ojos de Magnus y al igual que su padre el cabello pelirrojo brillaba con el sol.

-Me alegra que pienses en tu amiga.

-Es para que no vuelva a patear árboles mami, tal vez papi pueda ser uno y le haría daño si le da un puntapié-levantó los hombros.

Sabrina estaba orgullosa de que su hija pensara en los demás niños y en la naturaleza. Peach creía que en cada partícula de la naturaleza iba a estar su padre como en mariposas, conejos, girasoles y sus favoritos los claveles.

-Debes dejar esas sobre la tumba de papá-la niña asintió para acomodar el ramo justo donde su madre le había indicado.

-La tumba de papi se ve muy linda-celebró subiendo sus gafas.

-Papá era muy guapo, las flores están a su altura.

Estuvieron durante algunos minutos ahí, a Sabrina no le gustaba estar mucho tiempo ya que se siente melancólica y en su pecho se creaba una presión inexplicable.

-¿Por qué papá tuvo que morir?-preguntó Peach desde el asiento trasero.

-Papá murió siendo un superhéroe, salvó a tu hermano y a mamá, así como las historietas que tanto le gustan a Nick-le sonrió a su hija deteniéndose fuera de su casa.

Bajo del auto junto a la niña quien entró corriendo a casa, dentro de esta esperaba Nick y Noah sentados en la mesa familiar, ambos tenían sus brazos cruzados y sonrieron al ver a su madre entrar.

-¿Por qué papá tenía que morir?-volvió a preguntar Peach-. ¿Por qué papá tenía que morir?

-Cariño...ya te lo dije.

-Por que mamá lo mató-habló Nick cruzando sus brazos y mirando fijamente a la mujer-. Mamá mató a papá.

-Nick eso no es...

-Es verdad-apoyó Noah-. Tu mataste a mi padre.

-Sabrina.

-¡Asesina!-gritó Noah golpeando la mesa para señalarla.

-No. no, no-negaba tapando sus oídos.

-Sabrina, despierta-la chica soltó un jadeo despertando asustada para mirar a su alrededor, estaba en la habitación de Magnus dentro del hospital-. Parece que tuviste una pesadilla.

-Estoy...estoy bien-aseguró sonriendo el padre de Magnus.

-El médico dijo que vendría en unas horas, la transfusión fue exitosa asique en unas horas debería despertar o cuando su cuerpo lo quiera hacer.

Asintió mirando a Magnus dormido en la cama, llevaba una cánula de oxígeno nasal y además en su brazo derecho una intravenosa.

-¿Puede quedarse unas horas? Debo ir a casa a ver a los niños. Peach se ha resfriado y los niños quieren que les lleve información del viaje de papá.

-Ve, ellos esperan ansiosos por que llegues a casa. No me moveré de aquí hasta que mañana por la mañana vengas tú.

-Muchas gracias, le diré a la enfermera que le traiga algunas frazadas.