Secuestrado (Itanaru)

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El azabache alistaba una maleta con velocidad mientras que Shisui y Sasuke ayudaban al nuevo miembro de la familia Uchiha caminar hacia el auto. El hospital quedaba a unos veinte minutos, Itachi rezaba por qué soportara el viaje. Su médico personal tenía lista una habitación privada para este momento.

Los cuatro Uchihas subieron al auto, Shisui manejaba mientras que el omega azabache iba en la parte del copiloto. Naruto e Itachi iban atrás, Itachi mantenía la calma pero por dentro se estaba muriendo de nervios, pues hoy nacería su hijo.

—Respira, bonito. Ya casi llegamos —el rubio omega sudaba frío.

Era casi media noche cuando el omega comenzó a sentir las contracciones, despertó a su pareja de inmediato y rápidamente alistó todo.

—Duele un maldito infierno... ¡aaaah! —gritaba de dolor poniendo más nerviosos a los azabaches.

—¡Por fin! El hospital —dijo aliviado el conductor Shisui.

Bajaron al rubio con cuidado y se dirigieron a las puertas, Sasori los esperaba con su ayudante Kabuto con una camilla. Subieron al omega a la camilla y rápidamente se dirigieron al la habitación personal del ahora Uchiha.

***Capitulo 38x3***

Los gritos del rubio podían escucharse afuera de la sala de parto, Kushina había llegado junto con Carlo aún en pijamas. Mikoto llegó media hora después. Todos esperaban pacientemente afuera, aunque un omega azabache estaba aterrado por los gritos de su ahora considerado mejor amigo y hermano político.

—Maldición... recuérdenme nunca embarazarme por favor —dijo aterrado Sasuke. A los presentes les cayó una gota por la nuca al escucharlo, sonrieron ligero.

Las puertas se abrieron mostrando a Itachi con el rostro algo cansado, atrás de él iba el médico pelirrojo con un cunero donde estaba el bebé.

Todos se acercaron al cunero, sonrieron en grande al ver al pequeño bebé.

—Itachi, le echaste bastantes ganas. Se parece demasiado a ti —el mafioso sonrió ligero.

—Dejaran a Naruto en la habitación privada, se quedará por una semana. El bebé nació un poco bajo de peso por la anemia de Naruto, pero lo trataran hasta que obtenga el peso adecuado —escucharon con atención al líder, asintieron levemente.

—Entonces, ¿cual es el nombre de este pequeño? —Itachi sonrió de dientes sorprendiendo a los presentes.

—Naruto y yo hablamos sobre los nombres, si era niña se llamaría Naori, pero gane yo y este pequeñito, es Denki.

El brillo en los ojos de todos fue evidente, Shisui se acercó más con una sonrisa de ilusión en su rostro.

—Pido ser el padrino del pequeño Denki —todos rieron por el comentario de Shisui.

Atrás de ellos un rubio aún débil salía en la camilla, era llevado por Kabuto hacia su habitación asignada. Iba con los ojos entre cerrados esperando no dormir.

—Itachi, uno más y ya no más hijos. Duele un infierno —los presentes comenzaron a carcajearse por el comentario—. Sasuke, apúrate a dar hijos con Caido, que yo ya no puedo —el menor de los Uchihas se sonrojó en extremo.

—¡Cállate, idiota! Yo no quiero hijos —volteó su rostro esperando ocultar su sonrojo.

La semana se paso con velocidad, el pequeño Denki era tratado en casa mientras que el omega descansaba un poco, esperarían que el nuevo integrante Uchiha obtuviera una mejor salud para comenzar su plan de retiro.