Capítulo 45 - Hermanas

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Chloe Mitchell

— Paciente femenina de 19 años de edad, con antecedentes de enfermedad cardiaca congénita no esclarecidas, ingresó ayer al servicio de urgencias después con pérdida de la conciencia, se le tomó un electrocardiograma donde se identificó un arritmia auricular, la cual fue corregido con Metoprolol.

— ¿Cómo ha evolucionado desde entonces?

— Tuvimos que darle un sedante porque se despertó muy alterada, vino acompañada de su Hermana y de su padre.

¿Padre? Los recuerdos vuelven a mi cabeza. Daniel Scott es mi padre.

Me siento cansada, el cuerpo pesado, escucho cómo hablan a mi alrededor, mis ojos hacen un esfuerzo por abrirse.

— Creo que la paciente despertó, Buenos días Chloe, soy Diego Ramirez, tu doctor ¿Como te sientes?

— Me siento cansada — le informó al médico.

— Es normal por el sedante que te administraron — me explica el doctor.

— Tengo sed — digo con la boca seca.

— En un momento vendrá la enfermera y te darán de beber y comer, te voy a dejar en observación por hoy y mañana te daremos salida — Yo asiento y él se retira. Me quedo sola en la habitación.

Al lado mío hay una mesita donde veo mis pertenencias, tomé mi teléfono donde veo mensajes de Tess y de David, pero no veo mensajes de Christopher, lo llamo y no me contesta.

Tess me dice que estuvo toda la noche y fue a su casa esta mañana para cambiarse pero que ya viene de regreso, le pregunto si ella le avisó a Christopher, pero no me contesta.

El sonido rítmico de los monitores llenaba la habitación del hospital, una melodía constante que apenas lograba calmar mis pensamientos caóticos. Ayer, el mundo tal como lo conocía había cambiado de forma devastadora, dejándome con un peso abrumador en el pecho. El recuerdo del desmayo todavía me perseguía, la sensación de vacío y desconcierto.

Cierro los ojos unos segundos, tratando de pensar que todo esto es una pesadilla.

— Ángel — escucho su voz — Ángel — debo estar loca por el que hasta lo escucho decir mi nombre — Angel — dicen más fuerte, abro mis ojos y él está parado a los pies de la cama.

Lo miro y le tiró la almohada

— ¿Por qué no habías venido? — le digo enojada

— ¿Amaneciste loca?

— ¿Qué? Y ¿Porque tiene la misma ropa de ayer?

— Cuando te deje en la casa de Tess viene al hospital, luego me la encontré en urgencias y me conto que estabas aquí — se sienta en la cama y pone su mano encima de la mía — Venía cada medio hora verte porque también tengo pacientes que revisar

— Mmm está bien — le digo, él se acerca a mi y me da un beso.

— ¿Me quieres contar que paso? Tess no me quiso decir nada, me dijo que tu deberias decirmelo — Respiré hondo, tratando de encontrar las palabras.

— Chris... Ayer descubrí algo que me destrozó — empecé, mi voz temblando — El padre de Tess... es mi verdadero padre. Mi mejor amiga es mi media hermana — Vi cómo su rostro se transformaba, pasando de la sorpresa a la comprensión y luego a la preocupación.

— ¿Cómo te enteraste?

— Lo escuché hablando con alguien por teléfono, luego él nos lo confirmó, a Tess y a mí — continué, las lágrimas comenzando a llenar mis ojos. — No podía creerlo, pero todo tiene sentido ahora. Todas las piezas encajan, el hecho de que me tratara como una hija más y todo lo que hizo por mi.

Arritmia - TOMO 1 (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora