Chloe Mitchell es una chica linda y hermosa quien pronto entrara a la universidad de Columbia para estudiar medicina, en este lugar conocerá muchas personas agradables pero también conocerá a un hombre que será causa de sus arritmias.
Una historia l...
Me van a matar en el hospital, aunque no es mi culpa, es culpa de Tess, le dije que antes de entrar al internado debimos haber conocido The Royal London Hospita, lel día anterior, pero no quiso, prefirió ir de compras y me convenció.
— ¿Qué pasa? — me pregunta Tess
— Que vamos tarde — le digo
— Nena, no puedes enojarte, estamos en londres, hoy iniciamos un nuevo camino en nuestras vidas — me dice Tess
— Si, pero David me dijo que no podíamos llegar tarde el primer día, los doctores son muy estrictos con eso.
— Tu novio es un impaciente igual que tu
— Claro que no, de hecho el ya esta alla
Tess empieza a manejar más rápido y por fin llegamos al hospital. Le preguntamos a una enfermera dónde queda la sala de internos y nos indica donde queda.
— Hola mi amor — me saluda david
— Hola mi vida — le doy un beso en sus hermosos labios.
— Ya, ya, ya, basta de cursilerias — dice Tess y yo le saco la lengua.
Nos callamos pues el Doctor Ernesto Salgado entra a la sala, es el director de este hospital, recuerdo la primera vez que lo vi hace cuatro años en esa gala.
Y es lo único que vamos a recordar
Si
— Buenos días internos mi nombre es Ernesto Salgado, director del hospital, es un gran honor darles la bienvenida al The Royal London Hospital. Hoy, inician una etapa crucial en su formación como médicos. Aquí, tendrán la oportunidad de aplicar todo lo que han aprendido y de enfrentar los desafíos del mundo real de la medicina. Este es un momento emocionante, pero también conlleva una gran responsabilidad.
<< Primero, quiero felicitarlos por llegar hasta aquí. Sé que no ha sido un camino fácil. Han dedicado años de estudio y esfuerzo para llegar a este punto, y cada uno de ustedes ha demostrado una notable dedicación y pasión por la medicina. Esa misma dedicación será esencial en los días, semanas y años venideros.
En el The Royal London Hospital, valoramos el compromiso con la excelencia, la empatía y la ética profesional. Nuestro hospital tiene una larga historia de atención médica de calidad, investigación innovadora y educación médica excepcional. Al unirse a nuestro equipo, se convierten en parte de esa orgullosa tradición >>
<< Al comenzar su jornada como internos, quiero que recuerden que están aquí porque se lo han ganado. Cada uno de ustedes tiene el potencial de hacer una diferencia significativa en la vida de los pacientes que atenderán. Aprovechen al máximo esta oportunidad, aprendan de cada experiencia y, sobre todo, nunca pierdan de vista por qué eligieron esta noble profesión.>>
<< Bienvenidos al The Royal London Hospital. Estamos emocionados de tenerlos con nosotros y esperamos verlos crecer y prosperar como médicos. A sus correos llegaron el residente al que están asignados >>
— ¡Buena suerte a todos! Muchas gracias.
A Tess y a mi nos tocó el mismo residente, la doctora Fernanda Lopez pero a David le tocó un Doctor.
— Mi amor, te amo, que te vaya muy bien en tu primer dia
— Que te vaya muy bien mi vida — le digo y David se va
— ¿Y siguen sin decirle te amo? — me pregunta Tess.
— No, todavía no he podido
— Pues que mal, él se debe sentir mal
— Pero es que yo lo quiero, pero esas palabras no pueden salida de mi boca, nose porque
— Yo si se
— Callate Tess
— Me voy a callar, solo porque nuestro padre, me está llamando — Tess me muestra el celular.
La relación con mi padre ha mejorado en estos años, ya por lo menos le digo papá y él me dice hija, hemos compartido algunas fiestas y cumpleaños, no voy a negar que eso me ha hecho sonar un poco mi corazón.
Unos chicos se nos acercan, van hacer nuestros compañeros en este internado, un afroamericano muy guapo, tiene unos ojos azules hermosos.
Parecen los de el
Es europeo se nota en su hablar, viene acompañado de un asiatico, es muy alto, algo peculiar. Nos saludamos y nos presentamos, el afroamericano se llama Steven y el asiatico Cristian.
— ¿No deberías tener un nombre más oriental? — pregunta Tess y yo le meto un codazo — ¿Que?
— Eres una imprudente
— No se preocupen, mis padres nacieron en china, por eso mi aspecto físico, sin embargo yo nací en Estados Unidos.
— ¿Ustedes son los estudiantes de la doctora Fernanda? — se nos acerca una chica rubia de ojos verdes, con piel de porcelana, parece una muñequita, yo asiento — Yo también soy su interna, me comunique con ella el dia de ayer, no está esperando en urgencias —
— Dos rubias, que bendición — dice Steven
— Que asqueroso — dice la muñequita — Por cierto, mi nombre es Tamara, siganme
¿Esta quien se cree o que?
Llegamos a urgencias y ubicamos a la Doctora.
— Buenos dias Doctora — dice Steven y le da la mano pero ella no se le da.
— No se molesten en adularme, ya los odios, son lo más bajo de la cadena alimenticia, así que espero que estén a la altura. Siganme
Qué bonito año de internado voy a tener.
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Mis amores, aquí les traigo el epílogo, que emoción.
Pero aquí no termina la historia, voy a dividir el libro en dos tomos o dos partes, como quieran decirle, este es el tomo 1, el tomo 2 ya lo pueden encontrar en mi perfil para que lo guarde en la biblioteca. Espero me sigan acompañando en esta travesía, los amo.
