ᴡᴏʟꜰ ᴋɪɴɢ || ʏᴏᴏɴᴍɪɴ.

¶20¶

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"Naciste en Busan, Jimin..." comenzó el alfa, su voz resonando con una mezcla de culpabilidad y determinación. "Eres Park Jimin, hijo menor de Park Baekhyun y Park Chanyeol. Eres el príncipe y heredero de Busan."

Jimin parpadeó lentamente, su mente intentando procesar las palabras de Yoongi. Sus ojos se clavaron en los del alfa, buscando algún rastro de broma o mentira. Pero Yoongi lo miraba con una sinceridad palpable, sus ojos llenos de cautela y verdad.

"¿De qué hablas?" Jimin respiró hondo, tratando de calmar su respiración que se aceleraba.

"No eres un sirviente, Jimin" dijo Yoongi con voz firme pero suave. "Eres un príncipe y estás destinado a gobernar Busan."

Jimin frunció el ceño, su mente resistiéndose a aceptar lo que estaba escuchando. Negó con la cabeza repetidamente. "Nací aquí, en Daegu. Mis padres vivieron toda su vida aquí sirviendo al castillo. Por eso estoy aquí también. Nunca he salido de este castillo, toda mi vida he estado aquí."

Yoongi acarició suavemente las manos de Jimin, intentando transmitirle calma. "No es así, cariño. No eres de Daegu. Naciste en Busan. Tus padres son los reyes."

El silencio se hizo pesado en la habitación mientras Jimin intentaba asimilar la revelación. La idea de que sus padres no eran sirvientes, sino reyes y que él era un príncipe, se sentía demasiado surrealista.

Jimin cerró los ojos por un momento, intentando encontrar algún recuerdo perdido, alguna pista que confirmara lo que Yoongi decía. Pero solo encontró el vacío de una vida de servidumbre, marcada por la soledad y el trabajo duro.

Aunque en ese momento Jimin también recordó ciertas palabras.

"Mi príncipe."

Fueron dichas por el omega de cabello gris anteriormente. Y con solo esas palabras volvieron a él las imágenes de los extraños acontecimientos que vivió los últimos días, el raro actuar de Seokjin, la información en el libro que había encontrado y la conexión profunda de familiaridad y nostalgia que sintió al ver los dibujos del castillo, los reyes y el príncipe.

Era su hogar, eran sus padres, su hermano.

La realidad de tener a sus padres vivos y un hermano mayor también lo abrumó. Jimin sintió que se ahogaba, y un sollozo escapó de sus labios. Inmediatamente, Yoongi lo rodeó con sus brazos y lo subió sobre su regazo para sostenerlo mejor. La nariz de Jimin se hundió en el cuello de Yoongi, donde el aroma del alfa lo envolvía buscando calmarlo. Pero, aun así, las preguntas persistían en su mente.

"Si soy un príncipe..." comenzó el omega con duda en su voz "Si soy el príncipe de Busan, ¿por qué estuve toda mi vida aquí, solo y sin saberlo?"

Yoongi se estremeció al sentir la respiración de Jimin tan cerca de su glándula. "Es una situación bastante complicada" respondió, su voz temblando ligeramente.

El omega se alejó un poco, buscando los ojos de Yoongi, con el ceño ligeramente fruncido mientras reflexionaba sobre las palabras del alfa. "Me pediste perdón" murmuró Jimin y Yoongi asintió. "Dijiste que era en nombre de tus padres, especialmente de tu madre y que ella era la responsable. ¿A qué te referías?"

Yoongi guardó silencio por unos segundos, considerando cuidadosamente cómo explicar la situación. El omega había vivido toda su vida sin conocer su verdadera identidad debido a su madre y Yoongi sabía que lo mínimo que le debía él y toda su familia a Jimin era la verdad completa.