ᴡᴏʟꜰ ᴋɪɴɢ || ʏᴏᴏɴᴍɪɴ.

¶O7¶

♕♖✧♔♕

Miro hacia arriba desde el suelo para ver tus ojos tristes y llorosos, apartas tu vista de mi y se que hay algo que intentas ocultar, y yo tomo tu mano pero está fría. Te alejas de nuevo y me pregunto ¿Qué estás pensando? Entonces me dices que has cometido un error tonto, empiezas a temblar y tu voz empieza a romperse.

♕♖✧♔♕

 

Su lobo gruñía dentro de él, como un león hambriento atrapado en su propia jaula. La habitación era un caos total, sus muebles destrozados y esparcidos por el suelo. Las plumas blancas flotaban en el aire, evidencia de las almohadas desgarradas en su desesperado intento por encontrar alivio para su agitado estado.

Sin embargo, el alfa seguía molesto. Su lobo clamaba con urgencia desesperada por regresar hacia el omega que lo había rechazado, ansiando ser útil para el alivio de su celo. Sentía una urgencia desesperada por protegerlo, por calmarlo y asegurarse de que nadie más se le acercara. Su deseo era regresar, anudarlo, marcarlo y unir sus destinos de una manera irrevocable.

Yoongi gruñó con furia ante sus tumultuosos pensamientos, no podía hacerlo. El omega lo había rechazado, hiriendo su orgullo y dejando un amargo sabor en su boca. Otro gruñido retumbó en la habitación cuando sus colmillos destrozaron otra almohada, esparciendo plumas por doquier. Algunas de ellas cayeron sobre su hocico, provocando un pequeño estornudo.

Dos golpes en la puerta resonaron, y Yoongi gruñó con más fuerza al verla abrirse sin su permiso. La reina entró, observando el desastre con sorpresa y confusión, pero su expresión pronto se transformó en una de franca molestia.

"¿Qué diablos has hecho, Min Yoongi? " La reina escuchó su gruñido y lo miró con creciente indignación. "¿Acabas de gruñirme, Yoongi?"

Ante la falta de respuesta de su hijo la reina ordenó con firmeza. "Ve al baño y date una ducha. ¡Lobo malo! No quiero que esto se vuelva a repetir, ¿entendido? ¡Aunque seas el futuro Rey, aún puedo darte unas cuantas nalgadas! ¿Me estás escuchando?"

A pesar de su deseo de gruñir nuevamente, Yoongi se contuvo. Su madre ya estaba lo suficientemente molesta, así que se apresuró hacia el baño. Una vez adentro, comenzó a volver a su forma humana, dejando atrás la ferocidad de su lobo. Bajo el agua de la ducha, su mente seguía atormentada por el recuerdo del omega y lo que acababa de suceder.

Era el omega más embriagador que había olido, el único que deseaba tener cerca cada día. Sin embargo, su orgullo había sido herido, y él también había herido al omega.

♕♖✧♔♕

En la intimidad de su habitación, envuelto en la soledad y la penumbra, Jimin enfrentaba la marea que su primer celo provocaba. Había invocado la presencia de su alfa, un llamado silencioso que resonó en lo profundo de su ser y a través de la distancia, y fue Yoongi quien cruzó el umbral de su pequeña habitación.

Su celo ya había sido tardío, desviándose del curso esperado que dictaba que debería haber surgido a los quince años. Provocando en los siguientes años una espera llena de incertidumbre y ansiedad para Jimin.

La duración de su primer celo fue inusualmente breve; casi tan pronto como Yoongi abandonó su lado, el calor abrasador dentro de Jimin se disipó, quizás ahogado por la ausencia de su alfa, o quizá aplacado por el peso de la desolación que ahora comprimía su pecho.