ᴡᴏʟꜰ ᴋɪɴɢ || ʏᴏᴏɴᴍɪɴ.

¶09¶

♕♖✧♔♕

Nos besamos, caí bajo tu hechizo.
Un amor que nadie podía negar.

No digas que simplemente me aleje... Siempre te voy a querer.
No puedo vivir una mentira.

♕♖✧♔♕

Jimin se removió incomodo por la sensación de un peso que no reconocía sobre su pecho.

Era una presencia cálida y suave, pero al mismo tiempo imponente, que parecía enredarse a su alrededor con un brazo que se extendía hacia su barriga. Inicialmente, se sintió confundido, atrapado en las brumas de la inconsciencia, pero pronto el miedo y el pánico comenzaron a tomar forma en su mente, ahogándolo en una ola de incertidumbre y temor.

Con el corazón latiendo con fuerza en su pecho, Jimin luchó contra la neblina de sueño que envolvía su mente, esforzándose por abrir los ojos lentamente. Parpadeó repetidas veces, deseando desesperadamente que su visión se aclarara, que la penumbra se disipara y revelara su entorno con claridad nítida.

Cuando sus ojos se enfocaron lo suficiente lo primero que pudo discernir fue el techo blanco que se extendía sobre él. Era un techo que no reconocía, lejano y extraño en su apariencia, distinto del familiar techo húmedo y manchado de su propia habitación. Las comunes manchas verdes de la humedad que se filtraba a través de las paredes no estaban presentes, lo que le indicaba que no estaba en su hogar habitual.

Lo segundo fue al bajar la mirada hacia su pecho. Jimin se encontró con una maraña de cabellos azabaches. Su corazón golpeó con fuerza en su pecho, una mezcla de ansiedad y confusión se apoderó de él.

Quiso apartar bruscamente a la persona que se encontraba sobre él, pero una sensación de temor lo paralizó. Sabía que cualquier movimiento brusco despertaría a la persona junto a él, y en ese momento, Jimin no estaba preparado para enfrentar esa realidad.

Fue entonces cuando Jimin se percató de una tercera cosa: la piel del príncipe Min Yoongi estaba en contacto con la suya.

El calor que emanaba el cuerpo del alfa era palpable, envolviéndolo en una sensación reconfortante, pero a la vez inquietante. Una ola de pánico lo invadió por completo, confundiéndolo y dejándolo sin aliento.

¿Por qué estaban ambos desnudos?

La pregunta resonó en su mente como un eco perturbador, dejando a Jimin sumido en un mar de incertidumbre y desconcierto.

Jimin luchaba por desentrañar los hilos de su memoria, pero todo parecía envuelto en un neblinoso velo de confusión. Recordaba estar discutiendo con Yoongi en la misma habitación, su mente resonando con ecos de palabras acaloradas y gestos vehementes. También recuerda su cabeza doliendo por un momento y después de eso, todo se volvía borroso, como si su mente se negara a revelar los detalles de lo ocurrido.

Solo pequeñas escenas se filtraban entre las sombras de su mente, ofreciendo destellos de lo que había sucedido.

Veía imágenes de él y Yoongi, fundiéndose en besos cargados de pasión. Recordaba el roce de sus cuerpos, el calor del deseo palpable en el aire. Otros momentos, más borrosos aún, se deslizaban entre sus recuerdos, dejando a Jimin aún más confundido y sonrojado.

Con el corazón latiendo con fuerza en su pecho, las mejillas ardiendo y las manos temblorosas, Jimin comenzó a moverse con cautela, tratando de liberarse del fuerte agarre que lo mantenía atrapado. Cada movimiento era un desafío, un acto de equilibrio entre el deseo de escapar y el miedo a despertar al alfa que descansaba sobre él.