Louis observaba el techo de la habitación. Acurrucado contra suyo, el feroz lobo, dormía plácidamente.
Le dolían los glúteos. Y se sentía muy... pegajoso. Quería levantarse e ir a tomar una ducha, pero no quería desperar a Legoshi.Suspiró.
Acarició la cabeza del canino, masajeando sus orejas. Sonrió al verlo tan indefenso e inocente...-Tierno... -murmuró para si- y lindo-.
Besó tiernamente su frente, luego, con cautela y cuidado, fue al baño.
En ese momento, lo único que podía pensar que posiblemente se metería en muchos problemas; que tendría que dar explicaciones y lidiar con la ley... Mas, con Legoshi a su lado, todo saldría bien. Él lo protegería con valentía y determinación. Y juntos, enfrentarían y sobrevivirían a todo aquello que el destino prepara.