Una vida improvisada

Una maquina de matar

-¡¡¡MALDITA SEA ZHAN!!!- grito Li mientras su corazón casi se le salía del pecho.

-Hubiera apostado que no le volarías la cabeza lo hiciste bien, precioso- alago Isaac.

Zhan solo rodo los ojos por el apodo, el entrenamiento y las buenas prácticas de todos lo estaban convirtiendo en lo que muchos llamaban la mejor máquina de matar, el día de hoy Zhan no vería a Yibo así que Li y Isaac se ofrecieron a acompañar al pelinegro a practicar su tiro con armas.

Para la gran noticia de todos, Zhan tenía una puntería excelente así que Isaac aprovecho y paro a Li cerca de uno de los blancos y le coloco una manzana, para fortuna de Li le había disparado a ella y no a su cabeza.

-Olvídense, no vuelvo a jugar así con ustedes- retiro el sudor de su frente y fue directo a su asiento

-Te toca Isaac- dijo Zhan seguro.

-Preciosura confió en que le atines con Li dudo mucho que lo hagas conmigo, ya estuvimos aquí por más de cuatro horas hay que regresar a casa, los chicos van a llegar.

Todos estaban acomodando sus cosas cuando una llamada puso en alerta a Li, este después de colgar se acercó a ambos hombres.

-Intentaron entrar a la casa, Yibo me marco me dijo que no regresemos hasta que estén seguros, que todo está en orden, lo mejor no es quedarnos aquí.

-Entonces que vamos a....- su celular comenzó a sonar.

Don secuestros:

Zhan no vayan a casa, pídele a Li que los lleve al departamento de mi madre, cuídense mucho

Zhanie:

¿Seguro que todo está en orden?

Don secuestros:

¿A qué te refieres con estar seguros?

Zhanie

Si, Li se ve preocupado.

Don secuestros.

No es seguro por aquí, voy por ti en la noche llevo a mis primos a otro lugar, mantente seguro, Piccoli occhi color notte no te metas en problemas.

Zhanie:

Nunca lo he hecho, conduce con cuidado.

Don secuestros:

-Gracias

-Valla, valla el mundo se cae y ustedes en su burbuja de amor, par de ridículos-

-Li, Yibo me pidió que nos llevaras al departamento de su madre- ignorando el comentario de Isaac se dirigió a la otra persona, este solo asintió y les pidió a ambos que lo siguieran.

El camino a la casa de la madre de Yibo duro alrededor de tres horas, una vez llegaron se instalaron cada uno en una habitación, tenían que descansar pues la noche se acercaba y estaban agotados, Li le otorgó a Zhan la oportunidad de dormir en el que fue el dormitorio de Yibo.

-De verdad gracias- dejo la mochila que había preparado esta mañana sobre la cama del castaño.

-No agradezcas Zhan, ¿de verdad no quieres cenar algo?- se sentía en la necesidad de protegerlo

-No, solo estoy cansado me voy a bañar y voy a dormir un rato.

-Bien, probablemente Yibo llegue en la madrugada, así que no te asustes.

-De acuerdo, buenas noches descansen- dijo cuando vio otra figura parada en el umbral de la puerta

-Buenas noches dulzura- dijo Isaac haciendo que Zhan girara los ojos