Capítulo Quince

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Tal vez no había sido tan apresurado, tal vez realmente ya ansiaba ser desposada por Lisa de todas las maneras existentes, entregarse y ser suya y obtener lo mismo de ella.

Pero ciertamente, hubiera preferido charlar con los maestros en silencio.

Las cosas se habían descontrolado, no tanto, pero Jennie sabía que ya había gente en el reino susurrando por su matrimonio. Incluso había recibido más de cincuenta felicitaciones ese día en cuanto salió de sus aposentos.

Así que después de la comida, había decidido encerrarse en la habitación de Roseanne y permanecer junto al balcón completamente en silencio.

Allí permanecia, mientras cepillaba su cabello que caía en ondas sobre sus hombros, incluso había dejado el vestido Manobal y había elegido una prenda más ligera, era un vestido igual, pero aquel era de tela fina y brillante que parecía brillar por el mismo sol, en un color dorado que aprovechaba el color de su piel.

Era algo mucho más refrescante y ligero para ese día en especial.

Llevaba en paz tres horas, sin hablar, sin pensar demasiado y sobre todo sin recibir halagos. Era la perfecta tarde, no hasta que las puertas de la habitación se abrieron de par en par acompañada de una voz tan alta que giró en un salto hasta la figura entrante de su prometida, oficialmente.

━ Lo escuche ━ exclamó Lalisa buscando con la mirada la presencia de Jennie y acercándose hasta Roseanne que permanecía sentada junto a su pequeña mesa de estudio. Esta la miró, con una sonrisa en el rostro. ━ ¿Eso es cierto? ¿Será en cuatro lunas? ¿Mi boda será en cuatro lunas?

━ Me parece alteza, que es algo que debería charlar con su prometida y no conmigo. ━ respondió Roseanne, de inmediato señaló con la vista hacia el balcón y Lalisa alzó la mirada a él.

Y se miraron, los ojos hablaron en mil idiomas que Roseanne creyó entender todas las palabras silenciosas y se apresuró a levantarse de la silla y caminar hasta la salida, cerrando las puertas detrás suya.

Lisa se acercó con calma hasta el balcón, observando el viento que chocaba contra las telas que la cubrían del exterior y el vestido sedoso de su prometida chocando contra la figura de su cuerpo. Desde bajo aquella tela, se veía, más hermosa.

━ Sí alteza ━ dijo Jennie desde el exterior ━ Su boda se acerca.

Lalisa quito las telas del camino que le obstruian la vista y logró observar el rostro de Jennie, sus manos de inmediato pidieron de las suyas y no dudo un solo segundo en tomarlas. Dando con el toque cálido de sus palmas y observando la divinidad de su figura.

Jennie la observó, detenidamente, halagando y tal vez exagerando sobre que aquel día la veía un poco más atractiva - poco en mucho - ya que al parecer, habían decidido estar libres de alguna manera. Lalisa portaba ropas blancas llenas de escamas, con las puntas ligeramente grises y botas negras que llegaban debajo de sus rodillas. Además llevaba el cabello suelto y había abandonado la corona aparentemente y en su lugar había colocado una tiara dorada gruesa y brillante.

El cabello blanco brillaba con emoción en los rayos del sol y los ojos cafés repentinamente eran más claros a los ojos de Jennie.

━ Aparentemente no se me notificó ━ dijo Lisa acercándose hasta su lado y mirándola a los ojos ━ Tal vez, mi prometida tenga las explicaciones del porqué no se me fue informada de mi propia boda.

Jennie sonrió con fuerza.

━ Debo discúlparme con mi princesa ━ susurró tomando repentinamente de su mejilla con la palma de su mano ━ Y decirle a mi prometida que creo que debería de estar feliz en su lugar y no cuestionar las decisiones de su futura esposa y reina.

𝗘𝗺𝗽𝗶𝗿𝗲 | 𝗝𝗲𝗻𝗟𝗶𝘀𝗮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora