Distance (MONSAM🌈)

Capítulo 46

Habían pasado un par de meses desde que Lia tuvo la enfermedad, no fue nada fácil para la familia ya que tuvieron que cambiar un poco sus hábitos alimenticios, Evie comenzó la etapa de la pre adolescencia y tener a dos pubertas en casa, no era nada fácil para Sam y Mon. Y aunque tenían sus momentos, Lia sabía quien era la favorita de Sam y quien era la favorita de Mon.

Sam: Lia no haz terminado de comer

Lia: Ya me llené, lo juro

Mon: Tienes que comer mi vida, solo haz subido 1 kilo desde la ultima vez que fuimos donde el doctor — le dio de comer en la boca.

Lia: Llevo dos platos ma, por fa — sollozó.

Sam: No vas a venir a manipularnos Lia, come.

Evie: Mami ya puedo ir a jugar?

Sam: Si, lávate los dientes okey?

Evie: Si mami — subió corriendo.

Lia: No es justo, Evie ya se fue y yo sigo comiendo

Sam: Evie no necesita comer de más

Mon: Sam, no le digas eso.

Sam: Lo siento, pero es la verdad.

Lia comió a la fuerza el segundo plato de comida y al terminar, se quedó en la sala viendo cómo Sam e Evie jugaban en el jardín.

Mon: Vemos una peli mi amor? — dijo al notar su triste mirada.

Lia: Por qué mamá Sam me odia?

Mon: No te odia princesa, solo... está algo tensa.

Lia: Conmigo, porque con Evie está feliz

Mon: Hablaré con ella, tranquila – besó su mejilla.

Lia: Bueno...

Sam: Mon Mira lo que nos hizo Evie — sonrió al mostrarle el dibujo.

Mon: Sam, tenemos que hablar.

Sam: Yo no quiero un tercer hijo

Mon: Que? No!, no es eso. Lia se siente mal.

Sam: Si es porque no quiere comer, ya está de más decirle.

Mon: No, Sam. Lia se siente mal por tu culpa, te ve casi todo el día con Evie y eso le hace pensar que no la quieres. Recuerda que Lia tuvo una muy mala infancia, o ya te olvidaste el día que Kirk y esos malditos la tocaron? O cuando dejó de comer? O cuando se intentó suicidar?

Sam quedó completamente callada.

Mon: No te digo que dejes de lado a Evie, pero Lia también es tu hija Sam, y hay que quererlas a las dos por igual. Yo no quiero que le pase nada a Lia, ahora que está en la adolescencia, me da miedo que recuerde lo que pasó en la infancia — lagrimeó.

Sam: Y-yo, me comporté muy mal con Li... y ni siquiera se por qué.. Jamás olvidaré el día que nos entregaron los resultados de ADN — sollozó.

Mon: Hay que cuidarlas, todavía están pequeñas Sam, no quiero que les pase nada.

Sam: Prometo tratarla bien... Iré a hablar con ella ahora.

Sam le dio un besito a Mon y subió donde Lia.

Sam: Peque, estás ocupada?

La puerta estaba abierta, pero no había nadie. Un pequeño sollozo se escuchó en el armario.

Sam: Li? Estas bien cielo? — tocó el armario.

Lia: S-si — se escuchó con voz corta y suave.

Sam: Sal de ahí Li

Lia salió del armario y abrazó a Sam.

Sam: Hey, Que ocurre?

Lia no podía ni hablar de tantos llantos.

Lia: Prométeme que nunca jamás, jamás jamás en la vida va a venir algún hombre a la casa — sollozó.

Sam: De que hablas Li...

Lia: Promételo!

Sam: Está bien, lo prometo... Lo dices por Kirk..?

Lia asintió.

Sam: Mi niña...

Lia: No quize decirles nada, pensaba que me iban a decir que ya era cosa del pasado y que tenía que superarlo... — absorbió su nariz.

Sam: Jamás te diríamos algo así cielo... Eso en la vida podrá pasarse por desapercibido. Tu lo viviste, y no puedes olvidarlo... — besó su cabeza.

Lia: Cada vez que me pongo a pensar en eso, me doy asco — lagrimeó.

Sam: Tranquila Li, tus mamis estarán siempre aquí para ti si? Siempre.

Ambas se dieron un tierno abrazo por un largo rato.

Sam: Sabes, estuve pensando en proponerle matrimonio a tu mamá.

Lia: No estaban casadas?

Sam: No, no llegamos a casarnos

Lia: Pero se trataban de esposas

Sam: Si, lo se. Es que en esos tiempos no tuvimos buena situación económica — acaricio su cabello.

Lia: Pues yo te apoyo al 100%. Mañana no tengo clases, si quieres podemos ir viendo el anillo

Sam: Esa es una muy buena idea, necesitamos ver cada detalle. Tienen que haber globos, juegos, comida, música, tiene que estar 10/10.

Lia: Entonces haré una lista, mañana compramos el anillo y organizamos todo — sonríe.