"Previa en casa de Ruslana y Kiki sobre las 21". Mis ojos no hacían más que releer ese mensaje que Chiara me enseñaba desde su teléfono sentados en el salón. Estaba contando como se había ideado el plan y que lo normal es que antes de salir de fiesta siempre se tomara alguna cosa en este piso. El cuál ahora también era mío aunque ese mensaje obviase mi existencia.
La verborrea verbal que la medio inglesa a veces tenía me estaba abrumando. No soy un chico muy de fiestas, bueno, me gustan como a cualquier chaval de mi edad, pero ahora mismo prefiero planes caseros y a eso se le junta el echar de menos a los pesados de mis hermanos, la playa cerca de casa y el saber a sal, mis amigos con los planes de última hora yendo a pasar el día a la naturaleza...Puede que esa fiesta me venga bien para despejarme, aunque no sé si el susodicho que envió el mensaje cuenta conmigo en todo el plan.
- Hola - dice Ruslana entrando al salón frotándose los ojos aún recién levantada - Espero que esas voces un sábado solo sean significado de algo que merezca la pena.
- ¡Fiesta de bienvenida! - grita Chiara levantándose del sofá.
- Pero...
- Es la de la universidad de Álvaro y Juanjo, parece que está decidido que sea esa este año.
La pelirroja afirma con la cabeza mientras se despereza para encaminarse hasta la cocina según nos deja intuir por el cacharreo de cubiertos. Es la una de la tarde pero parece no importarla excesivamente que en menos de dos horas vayamos a comer. No tarda en aparecer de nuevo delante nuestra para ocupar el lugar donde estaba Chiara la cual se sienta a mí otro lado dejándome completamente rodeado por ambas chicas. ¿Contarán conmigo para la fiesta?
La conversación se ha tornado a los elementos que harán falta para esta tarde-noche. Alcohol, a poder ser tanto ginebra como ron ente otros; comida, tanto de picoteo como para podernos llenar el estómago y que no suceda nada inapropiado; refrescos, los cuales deben acompañar a cada una de las bebidas alcohólicas...
Observo como si de un partido de ping pong se tratase, una confirma lo que falta mientras la otra remata con la cantidad exacta que se necesitará entonces de ese elemento.
- Vete preparando Martin, va a ser una de tus mejores noches - me confirma Chiara.
- ¿Qué?
Mi voz suena como si no hubiera estado presente en el lugar mientras ellas hablaban pese a haber oído como apuntaban la cantidad exacta de 2 botellas de ginebra rosa "para tener por si acaso". Tenía entendido que era una previa...no una fiesta en medio de mi salón.
- Ay Martin, a veces eres tan inocente para un sitio como este que es... - Ruslana chasca sus dedos en mis narices para sustituir las palabras haciéndome pestañear por la velocidad.
- ¿Pero yo...?
- Ay por favor, por supuesto que tú también estás invitado - me corta la misma antes de que pueda acabar la pregunta.
- Creo que...
- Es Juanjo, no te va a incluir ahora mismo porque seguramente haya escrito ese mensaje con Vega. No se lo tengas en cuenta para futuras ocasiones.
Frunzo el ceño boqueando como un niño pequeño y sin poder reprochar nada más, observo como Ruslana desbloquea su móvil asegurándome que ya soy uno más por vivir en este piso. Eso me da pase directo al grupo de los amigos, primero parece echar a alguien, probablemente a la anterior persona a mí para agregarme acto seguido en el grupo.
Mi móvil vibra con mensajes de bienvenida que leo tras la pantalla de ambas chicas las cuales contestan efusivas a todos asegurando que la previa será prometedora. Sin embargo es un mensaje del mismo que ha sentenciado el lugar antes el que consigue cortar todas las gracias.
ESTÁS LEYENDO
Vorágine.
Fanfiction¿Y si en vez de la comodidad decidimos poner todo patas arribas? ¿Qué pasaría si dejamos atrás nuestro pasado y vivimos el presente? Una vorágine, el remolino del agua del mar, una catarsis de psicodelia y el torbellino que remueve las hojas en ple...