jungkook

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Kook no era un santo, menos lo era su novia, pero... ella sí disimulaba. Ella, una estudiante estrella, él era un vándalo, pero uno muy guapo y sumiso cuando se debía.

Su novia lo mantenía a raya con un pene de goma en el culo, el coreano amaba tener uno en la boca y otro en el culo, nunca era demasiado para él. Y cuando sus suegros se iban de viaje... oh dios, eso era un paraíso, ahí sí iniciaba el verdadero caos.

Con la excusa de ir a estudiar a casa de su novia, Kook salía de casa con una mochila vacía y llena de porquerías, bien depilado, encremado, perfumado y listo para que su mami le rompa ese pequeño agujero hasta que él tenga que pedirle a gritos que se detenga, eso le gustaba a Kookie.

"Mami, hazme caso... fui bueno esta semana." Él jadeo mirando a su novia mientras él estaba con los pantalones abajo, dos dedos en su trasero mientras él jugaba solito al lado de su noona en el sofá. Un dildo rosa estaba a su lado, uno que había sacado del dormitorio de su noona, aunque sin dilatarlo más, era prácticamente suyo, pues su culo ya se había adueñado de él.

"Saliste a drogarte durante clases, ni se te ocurra que pondré un dedo sobre tí." Ella mencionó sin siquiera verlo mientras hacía unas cosas de álgebra en su cuaderno.

Kook hizo un pucherito, si era cierto, él hacía eso recurrentemente con su pandilla, ¿pero que más daba si no lo atrapaban? sea como sea, su novia odiaba eso.

"Mami, p-por favor. Kookie necesita a mami... me he sentido tan apretadito, quiero que mami me estire." Él lloriqueó suspirando, la mano de Kook agarró la de su noona sin permiso, y quiso acomodar sus dedos para poder meterselos él mismo.

Ella le dio un golpecito en la mano, "carajo, kook." Ella le regañó toscamente, si bien ella lo regañaba a diario por ser tan inmaduro e impulsivo... él se sintió rechazado. A Kook no le gustaba que nieguen su cuerpo.

Jeon de inmediato frunció el ceño y se giró en el sofá dándole la espalda, él cruzó sus brazos tatuados y se hizo bolita el solo. "Te odio." Él susurró para sí mismo.

La muchacha rodó los ojos y siguió haciendo sus cosas hasta que, ups, ella comenzó a oír sollozos mientras que Kook sombra su nariz. Ella lo miró unos segundos, su cuerpo temblaba, él estaba molesto y dolido.

Ella suspiró y se montó encima de su espalda, poniéndolo boca abajo en el sofá, el mentón de Kook descansó en el respaldo mientras escondía su carita en la tela gruesa.

"Ya, no llores." Ella le susurró mientras le daba besitos húmedos detrás de la oreja, él seguía sollozando en silencio aunque no se negaba a que su novia se prepare para follarlo.

Kookie oía a su novia abrochándose el strap-on mientras él hipaba y, sigilosamente, abría sus nalgas con ambas manos, esperando a que su mami entre en su huequito mojado y listo.

Ella lo miró sospechosamente y sonrío, si, todo fue un plan de Kook, hacerla tener pena por él y darle lo que quería. "Sé lo que haces, príncipe." Ella le susurró mientras le mordía el hombro.

Kookie la miró por encima de su hombro, sus ojitoa llorosos estaban dilatados, sus pestañitas pegadas entre sí y sus dientecitos de conejo se asomaban por sus finos y húmedos labios. "Lo siento, mami." Él balbuceó dándole una diminuta y tímida sonrisita juguetona.

Sonrisita que se cambió por una boquita abierta y ojitos cerrados y apretados. "O-ah, ay mami." Él se quejó cuando la polla de su noona comenzó a abrirse paso en sus paredes blanditas. Kookie enterró sus uñas en sus nalgas, pasando una mano al respaldo del sofá para agarrarlo también.

"MAMI." él jadeó alzando la voz cuando toda la polla estuvo dentro, los testículos de goma colapsaron contra sus nalgas. Kookie dejó caer un pequeño hilo de baba de su comisura izquierda, debido a que su boca estaba abierta aún.

Su novia hizo una primera embestida, haciéndolo relamer sus labios y soltar un jadeo. Kookie abrió sus ojos por pequeños instantes pues volvió a apretarlos cuando su novia comenzó a follarlo más y más rápido.

Kookie se agarró del sofá completamente, su carita era una expresión de dolor pero a la vez de extasis, no había sustancia que se acercase a este sentimiento de ser penetrado tan deliciosamente. Esta vez su novia no le daba el rico dirty talk que Kook anhelaba, aunque él sabía que no se lo había ganado para nada esta semana.

Aunque él era caprichoso, él no se quedaría atrás. "M-mami, ¿te gusta mi coñito?" Él preguntó mirando a su novia entre sus pestañas, dándole sonrisitas que imitaban al aegyo que él solía hacerle cuando quería cosas.

Al momento en que ella no respondió, Kookie hizo hacia atrás sus caderas, penetrando su culo con más ánimos. "M-m-mami, mi coñito se siente bien." Él ronroneó de manera aterciopelada, buscando respuesta de su novia.

Kookie soltó un 'awh' devastado mientras seguía follándose a sí mismo más y más rápido. "M-mi coñito." Él balbuceó metiendo un dedo extra entre el pene de goma y su agujero, Kookie inició una doble penetración a sí mismo mientras sollozaba del placer.

Su novia disfrutaba del espectáculo, su novio todo desesperado mientras pedía más y más, intentando llamar su atención al hablar de su coñito. Su debilidad.

Kookie la miraba con ojitos llorosos en e último tramo, su mano tatuada agitaba su propia polla con furia mientras miraba la cara de su novia con expresiones de puro placer, jadeando y gimiendo como si estuviese en una orgía. Kook tenía potencial para ser un actor porno, eso no tenía discusión.

A Kookie le gustaba ver a su novia mientras ella lo follaba, le gustaba todo de ella. Él era sucio y sin tabúes.

Cuando él sintió su orgasmo aproximándose, Kook sacó la lengua, abriendo la boca frente a su noona mientras la miraba por encima de su hombro, pidiendo su saliva.

Kookie le hizo ojitos, a este punto golpeando el respaldo por la desesperación de quererlo todo. "Noona escupeme." Él sollozó impaciente, siendo más agresivo con sus embestidas y movimientos.

La muchacha lo miró no convencida, aunque tras una nalgada sonora y una embestida que probablemente le hubiese llegado hasta el vientre, ella dejó caer un hilo de saliva hacia su lengua.

Kookie apretó sus ojos de manera deliciosa, su polla teniendo espasmos adorables mientras él tenía una expresión de puro placer, sin saber que ya se había corrido. Kookie saboreó todo de su novia, agradecido de que ella le haya cumplido sus caprichos incluso si estaba enojada con él.

Kookie se removió gustoso una vez pudo calmarse, sus manitos buscaron a su novia, acurrucandose en ella mientras buscaba un lugar seguro para recuperarse. "Gracias, mami." Él ronroneó en su cuello, mirándola con ojitos llenos de placer y relajación.

"Prometo no causarte problemas, mami, Kookie quiere ser un buen chico para ti." Él imploró acurrucandose más. ¿Quién le diría que no a este rey?

Ella suspiró y metió dos de sus dedos en su lindo y dilatado culo, "ya, ya, espero que cumplas tu promesa, bebé." Ella lo mimó dedeandolo por unos segundos mientras él se relajaba.

"Sí, mami." Él susurró mordiendo su labio inferior, sonriendo y mostrando esa dentadura de conejito. "Te invito la cena y el postre, mami." Él habló orgulloso, dejándose ser.

Volví, mis lectoras. La verdad es que estuve releyendo los capítulos y me inspiré un poquito, este es un pequeño comeback, pero les voy a ir actualizando todavía 🤭💖 no me odien por desaparecer, las mejores cosas se hacen esperar 😼😈

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⏰ Última actualización: Aug 08 ⏰

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