Hace más de 10 minutos habían pasado desde que comenzaron a discutir en el vacío salón de clases, ser nieta de la directora al fin había dado frutos, permitiéndole estar en el instituto totalmente a solas con su novia.
Jisoo temblaba, su abdomen estaba suavemente contraído mientras sufría de espasmos repetitivos. ¿La razón? su novia y sus interminables rondas de sexo salvaje, a veces los celos de Jisoo eran un desencadenante para la mayor, puesto que siempre eran con un trasfondo sexual. Jisoo amaba ser follada mientras su novia estaba furiosa con ella, aún si sabían que el problema no era cierto, la forma tan desconsiderada en que frotaba su clitoris, o simplemente como su pene llenaba su interior mientras ella estaba de espaldas con su cabello siendo estirado. Eso era el cielo para ella.
Ahora mismo se sentía débil, realmente se había corrido de las maneras más difíciles posibles, pero su chica no parecía para nada satisfecha, necesitaba más de ella.- sobre el escritorio con las piernas abiertas.- ordenó mientras cambiaba el antiguo preservativo por uno nuevo, tirando el otro en la pila de los otros tres utilizados. Jisoo se resignó a abrir las piernas como ella se lo pidió sin antes tomar por sí misma el pene de su novia para quitar el preservativo.
- ¿qué crees que haces? - cuestionó la más grande mientras tomaba otro paquete con la intención de abrirlo.
- quiero que te vengas dentro de mí.- susurró a la vez que pellizcaba sus rosados pezones con delicadeza, sacándole una sonrisa a su novia al ver sus pequeños dedos tratando de complacrse con la intención de actuar sexy. Sin dudas le dio lo que quiso, entrando en ella bruscamente, llenándola en el momento.
Sus movimientos comenzaron rápidos y fuertes, notando como Jisoo se retorcía y enredaba sus piernas en las caderas de su novia, tratando inútilmente de que ella vaya más profundo. Sus gemidos eran música para todo aquel que la escuche, la manera en que su voz angelical se rompía cuando su novia tocaba su punto G repetidas veces era asombroso.- dios, eres malditamente tierna.- susurró en el oído de Jisoo, sintiéndola abrazarla con fuerza mientras su cuerpo temblaba y ella lloriqueaba por la desesperación de llegar al orgasmo.
- dentro, por favor dentro.- suplicó sosteniéndose de su novia lo más fuerte que pudo, impidiéndole salir de ella antes de venirse. La contraria no pudo evitar besar sus labios suciamente, con esa falta total de compasión por su pasiva que hacia a Jisoo desentrañar sus más masoquitas deseos de ser maltratada y utilizada como un simple juguete sexual.
Los gemidos pasaron a ser casi gritos, aquel pupitre fue sospechoso de casi quebrarse por la fuerza de las embestidas. Todo aquello llevándolas al borde del placer, logrando que el esperma llenara ele interior de Jisoo tal y como había deseado.- te amo.- lloriqueó sintiendo el caliente líquido recorrer su entrada en el momento en que su novia salió de ella.
- te amo mucho más.- contestó tomando el rostro de su pequeña chica, dándole un beso cargado de dulzura. Si bien Jisoo solía ser juguetona, sabía que no se sentía insegura con respecto al amor que su novia le tenía.
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otro pedido realizado, espero que lo hayan disfrutado 💖
