T2 capitulo IV| Como quiero ser.

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Rio Pov.

Glass, Teresse y Lar'c nos mostraron la ciudad; también el camino a su casa donde pasaríamos la noche para el día siguiente ir a recoger el armamento por el que al parecer habían ido al pueblo.

Me emociona estar de vuelta, lo juro; pero ver a Raphtalia con la katana vasalla me golpea como mil cuchillas. Luego de darme cuenta de todas las similitudes entre las dos armas decidí que no iba a sacar mi katana de nuevo hasta volver a casa.

Según la anciana con la que me había encontrado los antiguos guerreros vasallos tenían una réplica de sus armas así como el arma que había usado el pontífice aquella vez. Solo que las de los otros fueron destruídas y la familia de la anciana pudo salvar está manteniéndola en secreto. Sin embargo ya no habían descendientes y me la dió por haberle ayudado. Que honor.

Y aunque Naofumu tuvo un pequeño percance con Kizuna las chicas y yo logramos controlarlo. Sigue siendo cabeza hueca aún sin estar en su mundo.

La casa de los de este mundo tiene un aire occidental y perdonen la mala educación pero lo primero que hice fue bañarme. Luego si salí a hablar con ellos. Me contaron lo que hicieron durante los días que estuvimos separados y juro que les fue tan mal como a mi.

Al final de la cena la mayoría subieron a sus habitaciones y Kizuna y Yomogi se quedaron en la sala para empezar el interrogatorio. Yo por mi parte me senté en la parte trasera para divagar en mis pensamientos.

Kyo nos separó pero pudimos juntarnos. Es un avance. Lo que sigue es lo de menos, pero debemos ser bastante precavidos porque ese idiota tiene aces bajo la manga y-

—Ah, ahí estás. Pensé que ya estabas dormida —maldición, esa voz.

—¿Me necesitabas?

—En realidad no, solo me aseguraba que no te separaras de nuevo.

Puse una cara de incredulidad y fingí una risa —Y dime Naofumi, ¿por que me alejaría de nuevo?

—No lo sé, tienes una habilidad excepcional para escapar de mi.

¡¿Escapar de el?! Me calumnia.

—Ja, ubícate. Lo único que hago es mantener distancia. Haz creado un vínculo con ellos en estos días y no quiero ser entrometida. Además sabes que me gusta estar sola.

Mis pies descalzos sobre el pasto es de las mejores sensaciones. La temperatura es ambiente y con la compañía de este ser tan tonto supongo que es mi pequeño sueño hecho realidad.

—¿Eso crees? —se sentó a mi lado sin quitarme la mirada. Casi como si pensara que de hacerlo desaparecería de nuevo.

No, eso no Rio. A Naofumi le gusta Raphtalia.

—Lo que yo crea no importa.

Hubieron varios minutos de silencio entró nosotros que fueron bien bienvenidos. Nada forzado es bueno y supongo que eso ya es parte de nosotros dos porque lo sabemos a la perfección.

— Cuando caí en este mundo, lo primero que busqué fue a ti. No porque te necesitara sino porque sabía que tú me buscarías a mi y no quería preocuparte. Fue aterrador y frustrante haberme separado —miré mis pies y la pequeña polilla que se posó en mi piel. Sonreí ante la mera idea de estar en lo correcto.

𝖯𝗋𝗂𝗇𝖼𝖾𝗌𝖺 | Naofumi X Fem Reader  PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora