Prioridad

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Esa noche los chicos tuvieron sueños muy raros, cada uno de ellos soñaba con las senshi pero en el fondo sabían que no eran ellas... al menos no las chicas con las que trabajaban en el presente; aquellas de sus sueños se veían más jóvenes, unas adolescentes y de todo aquello que parecía tan irreal pudieron distinguir los jardines del palacio de Endymion.

Kazuya soñó con una Venus escondiéndose, buscando algo o a alguien... por alguna razón tenía la sensación de que esa chica no debería estar ahí, pero era muy divertido mirarla intentando esconderse. También la soñó sentada a su lado mientras él sostenía su capa sobre ella para evitar que se mojara con la lluvia y también corriendo a él desde una colina y saltando a su cuello con una enorme sonrisa en su rostro en un hermoso día soleado.

Satoshi soñó con una joven Mercury que lo miraba como si estuviera analizando alguna especie extraña antes de acercarse a él; casi podía sentir como la tomaba de la mano y en el rostro de la chica se reflejaba un ligero rubor. La soñó sentada en la biblioteca del palacio con rostro sereno, apartando su mirada del libro y regalándole una hermosa sonrisa y también la soñó quitándose las botas y los guantes antes de lanzarse a un lago sonriendo divertida.

Naoto soñó con una Júpiter tirándolo al piso cuando le ofreció la mano para saludarla, casi podía sentirse a sí mismo riendo en el suelo mientras ella se arrodillaba a su lado con una mano en su boca avergonzada, la soñó oliendo las rosas del jardín principal fascinada y la soñó bajando manzanas con una escalera que él sostenía pero que sabía aún en sueños que no debía voltear hacia arriba hasta que ella bajo y le dio una de las manzanas acompañada de una sonrisa.

Jun soñó con una Mars parada en una colina mirando al firmamento mientras su cabello largo, negro e imposiblemente liso ondeaba detrás de ella; podía sentir su boca abierta mientras se acercaba lentamente a ella que lo miro sin demostrar ninguna clase de emoción o interés; la soñó corriendo feliz por los jardines con sus tacones en sus manos girando a su dirección y la soñó dormida sobre su regazo mientras él acariciaba su mejilla con el dorso de su mano.

Cuando despertaron lo único que tenían en mente era hablar con ellas de esos sueños, sabían que quizás esa era la clave de sus memorias borradas pero no sabían cómo acercarse a ellas y hablar de eso, ellas aún parecían renuentes a confesar los recuerdos que fueron borrados.

- Mercury...

- ¿Mmm? – Respondió sin dejar de prestar atención a los informes que leía de su último experimento.

- ¿Tienes recuerdos de nuestras vidas pasadas?

- Si, la mayoría... aunque a estas alturas no vale la pena recordar nada de esa vida

- Creo que hay algunos que vale la pena recordar... como cuando éramos felices – Dijo Zoisite mirándola fijamente

Ante esas palabras Mercury dejo los papeles en su escritorio - ¿Qué recuerdas?

- Te recuerdo a ti, siendo feliz... conmigo

Mercury no pudo reprimir el suspiro de alivio, su mayor preocupación era que recordará los acontecimientos que llevaron a la caída del reino lunar – Ah

Zoisite Frunció el ceño en reprobación - ¿No dirás nada más?

- ¿Qué puedo decir?... Escucha Zoisite, esa Mercury no soy yo... ni tú eres ese Zoisite; quizás seamos sus reencarnaciones pero ni tú ni yo somos los mismos de ese entonces

- Pero tenemos sus almas...

- ¿Recuerdas una vida anterior a esa? – Le pregunto Mercury seriamente

- N-No

- Nuestras almas son viejas Zoisite, significa que tuvimos vidas antes del Reino Dorado y el Milenio de Plata pero no importan, lo realmente importante es lo que hacemos ahora mismo... creí que ya no tocaríamos ese tema ¿Por qué es importante para ustedes?

Acuérdate de míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora