Charlie, Charlie...

Capítulo 15

El sueño aun me tenia en sus redes pero ya no podía seguir durmiendo, lentamente abrí los ojos... Algo era extraño ¿Estaba en mi cama?
Se sentía... y veía diferente...
Pero... Recuerdo haberme acostado en mi cama... Con Tom.
¿Tom? ¡Tom!
Desperté completamente despegando mi cabeza del pecho de Tom de un salto, y por la sorpresa caí de la cama.
Tom empezó a reír.

-Buenos días. -Dijo entre carcajadas. Me incorpore un poco y me senté en el suelo y apoye mi cabeza sobre el borde de la cama.

-No es gracioso. -Dije en un murmuro mas para mi misma.

-Si lo es.

-No lo es. -Negué con la cabeza pero Tom empezó a reír cada vez mas fuerte.
Y ya no era una risa normal.

-No te rías. ¡No te rías! -Exigi, pero el no se detenía. Su mirada no era la misma. Esos no eran los ojos oscuros profundos como lagunas que tanto me gustaban.
Estos eran psicóticos, lunáticos, y me daban miedo.

Reía cada vez mas fuerte y su sonrisa volvía a deformarse.

-Tom detente. Me estas asustando.
¡Tom, tengo miedo! -Tom seguía riendo e ignoraba lo que decía. Sus carcajadas se hacían mas fuertes e intensas, ahora parecían gritos.

-¡TOM! ¡TOM, POR FAVOR! ¡POR FAVOR DETENTE!

Abrí los ojos verdaderamente.

Solo había sido un sueño.
Pero... Estaba sola.
No veía rastro de Tom.

-¿Tom..? -Pregunte por el...

¿Se había ido?
¿Me había dejado también...?

-¿Tom? ¿Tom? ¡¿Tom?! ¡¿TOM?!
-Estaba sola... Se había ido...
Las lágrimas salieron nuevamente.
Sentía un dolor inexplicable en el pecho.
Como si mi corazón gritara.
Y no podía explicar el sentimiento.

-No estas sola... Yo estoy aquí. -Dijo el chico... Charlie... Acercándose...

-¡NO! ¡TOM! ¡¿DONDE ESTAS?! ¡TOM! ¡AYÚDAME!

No quería que se me acercara, o me tocara, pero aun así no podía evitar que entrara en mi mente.

Las lágrimas brotaban como si de una cascada se tratara.
Tenia miedo, tenía rabia.

Charlie se acercaba cada vez mas.
No podía moverme o apartarme.
Comenzó a gritar.
Al llegar a mi seco las lágrimas que estaban en mis mejillas.
Y yo estática, congelada.
Me frustraba el estar como estúpida sin poder hacer nada... Pero el miedo podía mas que yo.
Mordía mi labio inferior y apreté los puños enterrándome las uñas en las palmas de las manos.
La puerta se abrió y Charlie desapareció.

-¿Max? Max... -Se acercó Tom y tomo mi rostro entre sus manos

-Te fuiste... -Las lágrimas ya salían sin previo aviso.

-Max... Yo...

-Lo prometiste... Prometiste que no me dejarías sola.

-Yo-yo... Max, tu labio sangra. -Dijo y entonces sentí el sabor ácido en mi boca.
Lo limpie rápidamente y agache mi rostro.
Pero Tom me obligó a alzarlo y mirarle...
-¿Donde tienes un botiquín?
Agache la mirada sin responder nada... Pero entonces Tom soltó mi rostro y se dirigía hacia la puerta de baño.
Regreso unos minutos después con la minie cajita de primeros auxilios y se sentó al lado mio.

Con un algodón limpio la sangre de mi labio, puso una rara crema en mis manos y luego unas vendas en cada una.
-¿Estas lastimada en alguna otra parte? -Me preguntó y al ver que no respondía empezó a inspeccionar mi cuerpo.
Luego de un rato suspiro aliviado y volvió a tomar mi rostro entre sus manos juntando nuestras miradas...
-Lo siento... -Empezó a decir. -Yo... No quería dejarte sola, pero en un momento salí para buscar ropa y comprar algunas cosas sabia que sería algo rápido pero en menos de un minuto las cosas se salieron de control y... En verdad lo siento... Entiendo que estés enojada conmigo y que no quieras hablarme... Pero déjame seguir cuidando.