La concubina de BTS (+18)

LXXXVIII

Val

Después de estos días la siguiente semana fue un golpe de realidad a como sería mi vida con los chicos y sus apretadas agendas al tener la presentación tan cerca.

Me despertaba temprano para poder preparar el desayuno y desayunar juntos, les dejaba su almuerzo listo y los veía salir ya que al ser tan próximo el show PD me pidió me quedara en casa igual no era una pregunta y lo sabía.

Al quedarme sola en casa ponía música a todo volumen y perdía el tiempo ya sea en la tele o en algún juego de mi celular, también hacía ejercicio en un intento por mantenerme activa y no morir de aburrimiento, ya cuando comenzaba a a tardecer me ponía manos a la obra a hacer la cena para tener todo listo cuando ellos llegaban, cenar e ir a dormir con alguno de los chicos pues regresaban tan agotados que su cuerpo no podía darme tanta acción, pero lo entendía no eran maquinas.

Los primeros días recibí una visita de PD quien traía consigo un borrador del contrato para cuando me mudara a Corea aceptando el viaje y firmando por un año para estar con los chicos.

-¿Puedo leerlo antes de firmar?- le pregunte cuando me mostro a que venía

-Claro y si tienes tus propias peticiones también deberías de agregarlas para que en la junta donde estemos todos no quede ningún punto afuera

-Ok necesitare algo de tiempo

-Vuelvo en tres días para que lo chequemos

-Esta bien- PD no era muy expresivo con su manera de ser pero sabía que cuidaba a los chicos

Uno de esos días note que los chicos le pedían al chofer que volviera a la casa en caso de que yo quisiera salir, así que aproveche esa oportunidad para salir al supermercado y ya con las compras listas pasar a ver a Mari al refugio.

-Hola- salude cuando salió de aquella vecindad

-Pero que navecita- dijo señalando el carro

-Si y va a salir completa de aquí- advertí a lo que ella subió sus manos en son de paz

-¿Que te trae por aquí?- pregunto siguiéndome a la cajuela

-Les traje provisiones- señale las bolsas con comida a lo que llamo a las niñas para ayudar a meter las cosas

-¿Un café?

-Encantada

Nos adentramos al refugio y un montón de recuerdos golpearon mi mente, de los primeros días de aquel refugio y de como la mayor parte de mi dinero iba ahí.

-Toma asiento ya traigo el café- pidió Mari

-Gracias- veía como las niñas acomodaban las cosas en la mesa para comenzar a guardarlas

-Veo que has estado bien- menciono cuando se sentó en el otro silloncito

-No me puedo quejar

-No lo notas pero ahora tienes esa mirada- hablo Mari -la mirada de las películas cuando encuentras su final feliz

-¿Como sabes que es mi final feliz?- tome un poco más de café

-Porque en tus ojos hay esperanza, como si ahora quisieras vivir y ya no te conformaras con solo seguir existiendo

 -¿Si?- dije divertida

-Si, se nota que ese extranjero te hace feliz

-Me pidió que me vaya con él a su país- conté aligerando la verdad

-¿Y cuando te vas?- se veía emocionada

-Si me voy quien te ayudara a cuidar este lugar- hable sería -y seguro no volvería nunca

-¿Premio o premio?- jugueteó un poco -sabes que puedo hacerme cargo del refugio yo sola- me animo -y todas las personas que te queremos sabemos que vas a estar mejor cuando ya no estés al alcance de Mario

-¿Segura?

-No lo pienses más y deja que te lleven a conocer el mundo, por todas las que no podrán

Sabía que se refería al resto de las chicas de nuestra generación, gran parte había terminado trabajando para gente como Mario o siendo amas de casa del primer hombre que las acepto, Mari tenía razón esta era una oportunidad única

-Tienes razón- dije feliz -pero antes te voy a dar mi número

Me fui de la vecindad sabiendo que no volvería a verlas pero era momento de pensar en lo mejor para mi.

Tal como prometió el 16 en la mañana todos nos reunimos en su oficina, en cuanto entramos JK y yo compartimos miradas sugerentes que se volvieron miradas avergonzadas cuando vimos a Nam con su cara sería mirándonos a ambos

-Espero que todos hayan leído el contrato- todos asentimos

Era casi igual que el anterior solo que este incluía el viaje a Corea y el que yo estaba de acuerdo con ello, también incluía una clausula donde quedaba especificado que yo no podía quedar embarazada de ninguno de ellos ni tener hijos con los mismos, así como la parte donde decían que esto era meramente físico y los sentimientos no se incluían, tal vez ya era tarde para ese punto pero mientras pudiera mantener mis sentimientos encapsulados no abría problema.

-¿Alguien quiere agregar algo?- preguntó PD

-Yo si- dije alzando la mano como en la escuela por los nervios -quiero volver a estudiar, terminar la prepa y en caso de que entre a la universidad que ustedes paguen mis estudios

-¿Alguna objeción?- siete cabezas negaron como única respuesta -trato hecho Val iras a la escuela

Así concluyo mi participación pues los chicos aun se quedaron algo más de tiempo pero yo volví a casa ya que al día siguiente sería su presentación y estaba buscando que ponerme.

Chicos ya casi llegamos al final, entonces me preguntaba ¿si les gustaría que continuara la historia pero ahora ya con todos los personajes en Corea?