Tentación Mortal

Capítulo 9: un trabajo trabajoso

Luego de un largo trance miro al reloj que marcaba claramente las 9:30, había estado pensando durante media hora y lo peor de todo es que había llegado a toda esta incertidumbre gracias a pesadillas que me recordaban mi similitud con Ithan. 

No me gustaba darle vueltas a los temas, todo tenía una solución que se hallaba fácilmente, el haber estado rondando sobre una misma cosa por demasiado tiempo me impacientaba.

¿Cómo había llegado a esto? ¿Cuándo me volví tan paranoica? ¿Por qué los sueños me perseguían?, cada vez eran peores.

Yo estaba en la sima de un edificio, bajo mi se encontraba el abismo más grande que haya visto en toda mi vida y caería por él si el chico que me sujetaba soltaba mis manos.

Podía ver la duda en su rostro, y lo peor de todo era que podía oír sus pensamientos, sabía que él no quería soltarme, estaba decidido a dejarme vivir, pero un instinto asesino y casi animal le urgía que me tire y yo sabía perfectamente que los instintos suelen sobreponerse a la lógica.

Su rostro se aclaró, me reflejé en unos ojos idénticos a los míos y temí por mi vida, pero también ilógicamente por la de él.

Había decidido, pero yo no sabía si estaba lista para afrontar su decisión.

<< No tengo otra opción, te dejaré caer, pero no te preocupes, estaré detrás de ti>>

Saltó sujetándome mi mano y al deslizarme al centro de la tierra sentí mucho dolor. Mis sufrimientos de un pasado y la premonición de los que sentiría en el futuro me golpearon, y desperté.

Necesitaba saber las razones por las cuales mi cerebro se negaba a debelarme la realidad detrás de mis sueños, las razones de por qué la gente se parecía a mí; yo tenía una respuesta, estaba segura de eso, pero algo la bloqueaba. Era terrible la verdad pero dolía solo una vez, detestaba recibir pequeños golpes de mentiras.

Debía olvidar, ¿cuál era el mejor modo?, ¿volver a la rutina?

La rutina siempre te mantiene ocupado pero a la vez, si estás demasiado acostumbrado a ella, te hace pensar, estar pendiente por una distracción en la que ocupar tu cerebro, y el mío estaba de pleno sumergido en mis sueños, los cuales quería olvidar.

...

¿Cómo no lo había pensado antes?, había una persona hiperactiva capaz de sacarme de mis pensamientos, de hacerme olvidar de todo, alguien a quien había empezado a adorar y considerar mi salvación, mi balsa en el mar. Heily.

¿Qué era mejor? ¿E-mail o llamada telefónica? , suponiendo que hacía mucho que no hablábamos debo optar por el llamado, además, era más rápido de explicar mientras que a la otra persona le gustase hablar, cosa que en verdad le gustaba a ella.

- ¿Heily?, necesito tu ayuda, necesito despejarme, cambiar mi rutina, dejar de pensar en cosas en las que no debo pensar...

- Eso es perfecto.

- ¿Es perfecto el estar sufriendo por algo, así?

- Sabes que no quise decir eso, ya sé exactamente lo que vamos a hacer. ¿te apetece una tarde de chicas?

- ¿Estás de broma?, ¿cuantas veces te he dicho que no me gustan todas esas cursilerías cliché en el poco tiempo que nos hemos conocido?

- ¿Y yo cuantas veces te he dicho que conmigo nada es cliché, común u ordinario? , pintarse las uñas como unas muñequitas y hablar de Ken no está en mis planes.

- ¿Entonces cuales son? ¿cazar al conejo blanco por el bosque encantado?

- Oh, son más interesantes... incluyen mucha gente