Te quiero de vuelta👨‍👩‍👧‍👦✨️

CAPÍTULO 11

CESAR PARRA.

- No debiste hablarme así - me reprocha Jiapsi nada más Alaia sale de la oficina - Menos delante de una empleada - toma la cuchara y mueve su café.

- Tú no debiste tomarte atribuciones que no te he dado - le digo con voz dura - A mis empleados los contrato yo, les ordeno yo y les pago yo - aclaro - Si no te gusta ya sabes lo que tienes que hacer - le dejo claro, me molesto tanto su comportamiento hace un rato con Alaia, estaba marcando un territorio que no le pertenece y nunca le va a pertenecer. A pesar de ser una hermosa e inteligente mujer, su forma de ser lo estropea haciéndola insoportable a veces, ahora estamos tratando una expansión de su negocio en Phoenix y por cosas como estas me planteo si es una buena idea.

- Discúlpame, no sabía que eras tan celoso con tus empleados - su voz está llena de ironía - Creo que eso no es motivo para enojarse. ¿Te puedo presentar la propuesta?

- A eso viniste, ¿No? - ella asiente y saca su IPad del bolso y me muestra la propuesta, a pesar de ser algo diferentes a lo que me dedico, es muy poca la inversión y según las proyecciones los beneficios son buenos.

- ¿Qué te parece? - dice emocionada al terminar.

- Es buen negocio - por primera vez la veo sonreír de verdad - Solo tengo que discutir la propuesta con Ros y te doy una respuesta.

- De acuerdo - dice con desgana - ¿Cuándo puedo obtener respuesta?

- De lunes a martes - ella asiente.

Diez minutos después tomo la excusa de acompañarla hacia el ascensor para ver a Alaia, pero para mí mala suerte ella no está. Según Jacqueline se le presentó un problema personal y tuvo que retirarse antes de tiempo, mi cabeza empieza a maquinar mil cosas y ninguna son buenas. ¿Le habrá pasado algo a los niños? ¿O a su madre? ¿Peor aún se sentirá mal de salud?

Regreso a mi oficina y después de una lucha intensa entre mi consciencia y la razón, la última gana, tomo mi móvil y le marco, mientras espero los latidos de mi corazón se aceleran y cuando me manda al buzón se detienen abruptamente ¿Qué le pasa a Alaia? ¿Por qué no contesta el teléfono?

Camino al Mile High Club le marco por tercera vez, para mi buena suerte contesta, aunque no sea ella.

°LLAMADA A ALAIA°

(ANA JULIA) Hola - es la inconfundible voz de Ana Julia.

(CESAR) Hola, hermosa - susurro lleno de emoción, siempre que pienso en ellos me siento así. Vivo - ¿Cómo estás?

(ANA JULIA) Bien, Cesar. ¿Y tú? - contesta emocionada.

(CESAR) Me alegra tanto que estés bien - digo aliviado - ¿Tu mami está cerca?

(ANA JULIA) Sí, pero no puede tomar el teléfono, está conduciendo - me explica - Vamos para la tienda a comprar ingredientes para hacer hamburguesas. ¿Quieres venir a cenar con nosotros? Mami, ¿Puede Cesar venir? - pregunta emocionada.

- El señor Parra es un hombre ocupado, princesa. Luego lo invitamos - escucho decir Alaia, sin esperar mi respuesta.

(ANA JULIA) Ah, está bien, Cesar. Luego vienes, ¿Sí? - dice llena de esperanza - Podemos jugar las escondidas y tú eres de mi equipo. Mi mami y Paul siempre nos ganan a la abuela y a mí.

(CESAR) Está bien hermosa, así será. ¿Le puedes decir a tu mami que me llame cuando pueda?

(ANA JULIA) Yo le digo. Adiós, Cesar.