Más allá del guión / LingOrm

"un comienzo nuevo"

Finalmente, Ling fue la primera en romperlo.

-Orm... -su voz era suave, casi temerosa de lo que podría desatar-. He estado pensando mucho en todo lo que ha pasado entre nosotras. Y no quiero seguir evitando lo que siento.

Orm bajó la mirada hacia su taza, sabiendo que esta conversación era inevitable.

-Lo sé, Ling. Yo también he estado pensando en ello. Pero no es fácil para ninguna de las dos.

-No, no lo es -Ling suspiró-. Pero creo que ambas sabemos que esto es más que un simple impulso. Jakarin y yo... nunca podría haberle dado lo que realmente necesita porque mis sentimientos estaban en otro lugar. Contigo.

Orm asintió lentamente, pero sus ojos aún reflejaban la duda y el miedo que sentía.

-Ling, no quiero ser la razón de tu dolor ni la de Jakarin. Lo que pasó no fue solo tu responsabilidad. Ambas tenemos una parte en esto, y no sé si estoy preparada para enfrentar todo lo que eso significa.

Ling extendió su mano y la colocó sobre la de Orm, entrelazando sus dedos.

-Sé que es complicado, y no te estoy pidiendo que tomes una decisión ahora. Solo quiero que sepas que estoy dispuesta a luchar por nosotras, pero solo si tú también lo estás.

Orm levantó la vista, encontrando los ojos de Ling llenos de sinceridad y determinación.

-No quiero perderte, Ling. Pero necesito tiempo para procesar todo. Lo que sí sé es que lo que siento por ti es real, y eso es lo que me asusta.

Ling se acercó un poco más, susurrando:

-A veces, lo que más miedo da es lo que más vale la pena. No quiero que huyas, Orm. Quiero que nos enfrentemos a esto juntas.

Orm respiró hondo, sintiendo cómo el peso en su pecho se aligeraba un poco. Aunque las dudas seguían presentes, la idea de tener a Ling a su lado hacía que todo pareciera más soportable.

-Entonces, hagamos esto. No sé qué nos depara el futuro, pero estoy dispuesta a intentarlo.

Ling sonrió, una sonrisa genuina que reflejaba su alivio y esperanza.

-Eso es todo lo que necesito saber.

La tarde pasó en conversaciones sinceras y pausadas, donde finalmente, pudieron expresar lo que habían guardado durante tanto tiempo. El día terminó con ellas abrazadas en el sofá, viendo cómo el sol se ocultaba tras las montañas, con la promesa de un nuevo comienzo.

Después de aquel día fuera de la ciudad, Ling y Orm regresaron a su vida cotidiana, pero algo había cambiado entre ellas. Las conversaciones sinceras y la nueva conexión que habían formado durante su escapada añadieron una nueva dimensión a su relación. Sin embargo, ambos sabían que aún había mucho por resolver.

Esa mañana, las grabaciones estaban en pleno apogeo. El set estaba lleno de actividad, con actores y técnicos moviéndose por todas partes. Ling estaba en su camerino, vestida con su traje de doctora para la próxima escena. El traje le daba un aire profesional, pero a la vez realzaba su presencia, haciéndola aún más atractiva a los ojos de Orm.

Orm, por su parte, estaba sentada en el tocador del camerino, mirando su reflejo mientras ella terminaba los últimos retoques. El ambiente era tranquilo, con una suave música de fondo, pero la tensión entre ambas era palpable, una tensión que ya no podía ser ignorada.

Ling, terminando de acomodar su traje, se dio cuenta de que sus ojos se encontraban una y otra vez con los de Orm a través del espejo. El intercambio de miradas estaba cargado de lo que no se habían dicho en público, pero que ambas sabían que estaba ahí.