Capítulo XLVIII

4.4K 422 188
                                    

Capítulo 48|"Vestido azul índigo"👗|

Aleska.

Londres.

Nada funcionó. Absolutamente nada los hizo cambiar de opinión durante todo el día de ayer y la mitad de hoy.

Así que me queda literalmente medio día para casarme en contra de mi voluntad. Intenté todo lo que estaba dentro de mis manos y si ellos se molestaron simplemente no me lo hicieron saber.

Para sorpresa de...bueno de literalmente todo el mundo, ellos son los que se están encargando de los preparativos de la boda. Por qué he logrado oír del poco personal será algo muy cerrado.

Claro que lo sería, no me sorprende si amenazaron a un sacerdote para que haga la boda. Será a campo abierto y bueno, eso es todo lo que logre escuchar. Ni siquiera Julio sabe mucho al respecto aunque intenté persuadirlo y amenazarlo, solo que simplemente me dijo que Alek le dió la información resumida.

Al parecer solo vendrán sus familias y de la mía solo estará el enano, Hans, Liam, Aurora, su casi esposa Tatiana y Clara.

No hace falta mencionar que mi abuela me matará y que mis padres adoptivos también lo harán. Aunque dudo que a los últimos les importe mucho pero mi abuela me cortará en trocitos.

—¿Ya te cansaste?—la voz de Aleixander me hace voltear.

—Que te importa, imbécil—lo ignoro mientras sigo revisando mis redes sociales.

No público nada, no tengo foto de perfil y tengo un nombre falso, pero me sirve para estar en sintonía con el resto del mundo.

—Me importa si rayas mis autos de ediciones especiales.

Ruedo los ojos centrándome en darle like a todas las historias recientes de Aurora.

—Te comió la lengua el ratón, principessa, y yo que creí que querrías hablar conmigo—se burla sentándose en el respaldo del sillón en el que estoy sentada.

—Lo único que quiero hacer es ahogarte hasta que dejes de respirar.

—Poético—sonríe arrogante y las ganas de darle un puñetazo para borrar la sonrisa incrementan a cada segundo—. No creo que quieras arruinar mi cara, mañana en el altar debo estar presentable.

—Eso no sucederá, ya te dije que prefiero...

—Prefieres ahogarte en una tina con nuestra sangre antes de casarnos, ya hasta me lo sé de memoria.

—Entonces ya sabrás que no me pienso casar contigo—sonrió con toda la intención de verme como una hija de puta.

—Oh claro que lo haras—ahora el que sonríe es él—. Acéptalo amore, nos casaremos, cuánto antes lo aceptes menor será el golpe—y entonces me da un golpesito en la frente.

Hijo de perra. Lo voy a matar en serio.

—Maldito, te haré la vida miserable así nos casemos o no—grito a sus espaldas.

—¡Quiero verte intentarlo, principessa!

Oh lo intentaré. Eso es seguro. Aunque no voy a distraerme del hecho de que el maldito imbécil me estaba distrayendo y molestando solo para darle tiempo suficiente de poner el anillo sobre el sillón.

Blue Queen [#2] [+21]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora