Drogas y videojuegos.

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—Aparentemente, el increíble Oikawa Tooru tiene novia.

—¿Perdón?, ¿que tu qué?, ¿con mi qué?, ¿en una qué?, ¿¡hicieron qué!?

—Está drogado.

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—¿Como llegaste a esto?— Interrogó Atsumu en un susurro, Oikawa se encogió de hombros. Cada día se estaban sentando en un lugar diferente, antes se sentaban casi al frente, junto a Iwaizumi y Hanamaki. Por unos días se sentaron atrás junto a Kenma, y por otros junto a Akaashi. Esta vez era el turno de sentarse solos en el centro, este largo proceso era en busca del mejor sitio del salón, o sea el punto en el que podían hablar sin recibir ningún regaño, por ahora, este iba bien.

—No tengo la más mínima idea.— Susurró Tooru.— Estábamos en la cafetería y literalmente de la nada se refirió a mi como su novio.

—El lado positivo es que no es pegajosa, ni siquiera se sienta cerca de ti.

—Es raro, todas mis novias anteriores no se podían despegar, aunque las entiendo, soy yo.— Atsumu soltó una risa suave.— Pero no me estoy quejando.

—¿Como puedes ser novio de alguien y no darte cuenta?, algo hiciste.

—No estoy seguro, yo pensé que tenía que pedirlo, no que era automático.— Atsumu dejó salir una risa y Oikawa le pegó un codazo al ver que la profesora los estaba mirando.

—¿Entonces te gusta?

—Si, o sea, no, más o menos.— Suspiró con estrés, volteando a mirar a la chica, pero estaba sentada tan cerca de Iwaizumi que su mirada simplemente se desvió.— Es guapa.

—Literalmente estás hablando de Iwaizumi.

—Claro que no.— Volvió a enfocarse en el apunte que llevaba por la mitad y no pensaba completar.

—La miraste y luego lo miraste a él, admítelo, solo la invitaste a salir porque se parece a él, y ahora no le quieres terminar porque cuando la besas te lo imaginas a él. Incluso utilizaste "guapa," ese no es un cumplido que normalmente usarías con una chica.

—Eres una persona bastante molesta, ¿lo sabes, no?— Atsumu asintió con una sonrisa orgullosa.— Y solo para tu información, no me gusta, me atrae, lo cual es totalmente diferente.

—Pero te atrae de una manera heterosexual.— Agregó el teñido sarcásticamente, Oikawa asintió.

—Totalmente.

Atsumu iba a refutar cuando de la nada escucharon un "psss" que obviamente intentaba ser más discreto de lo que era, se voltearon hacia donde venía el sonido.— Suna va a invitar a todos el viernes por la noche a una discoteca, antes de que la inauguren sus padres, ¿van a ir?— Preguntó Terushima y los dos asintieron.— ¿Ya pagaron el cover?, me pueden dar el dinero y yo se lo doy a Suna.

—¿Puedo invitar a alguien?— Interrogó Oikawa, el de piercings asintió con una sonrisa.— ¿Y como vamos a ir?, no dejan salir después de las ocho.— Buscó algunos billetes en su bolsillo.— Cuatro, Oikawa Tooru, Atsumu Miya, Kenma Kozume y Akaashi Keiji, no me des cambio.

—Un placer hacer negocios contigo, y al respecto de tu pregunta pues...— Paró un segundo para mirarlos a los dos detenidamente.— Si saben como las chicas de primero están en los cuartos del primer piso...

—No me gusta hacia donde va esto.— Comentó Atsumu.

—No es nada malo, solo que algunas están enamoradas de ustedes, obviamente también de mi, pero tengo una reputación en primero y yo no puedo ayudar, entonces dependemos de que ustedes dos le pidan a una que nos deje salir por su ventana. Si pueden convencer a un apartamento entero ganan puntos extra.

Apartamento 512Donde viven las historias. Descúbrelo ahora