ENZO
Salgo de la casa rápidamente, me subo en la YZ y salgo de la hacienda. Tomó el camino solitario hasta que llegó al árbol donde estuve con Emma aquella vez de los Mustang, me siento debajo de el, suelto una risa recordando la vez que se le ocurrió que hiciéramos la vuelta en el carro a un solo tiempo.
No sé qué se supone que aré ahora, Emma se va mañana y no sé qué hacer, no quiero que se vaya de mi lado.
¿Que se supone que aré en mis momentos libres? Siempre los paso con Emma y ¿ahora?, ya no.
Me levanto y me paro viendo la carretera lejana, camino hasta la YZ y me subo rápidamente, regreso a la hacienda en tiempo récord, dejo la moto afuera y entro a la casa, todo está a oscuras me dirijo a la cocina y tomo un vaso de agua, me lo bebo rápidamente, salgo de la cocina y subo las escaleras hasta la habitación, abro la puerta y todo está oscuro, puedo ver el bulto que hay en la cama parece que está dormida.
Me voy al baño directamente, me doy una ducha rápida y salgo del cuarto de baño me dirijo al clóset y saco unos boxers y un buzo de chandal, me los coloco rápidamente y me acuesto al lado de Emma. Me acerco hasta quedar completamente pegado a ella, la rodeó con los brazos pegándola a mi cuerpo, inhaló el olor de su cabello, mierda, mierda, no quiero que se vaya.
Trato de dormir pero no puedo, me despierto cada hora.
*****
Me despierto y la cama está vacía, me levanto rápidamente y voy hasta la habitación de al lado, entro y me voy a la ventana donde se aprecia la ventana de la habitación de Emma, las cortinas están abiertas de par en par, ella está sentada en la cama de espaldas a mí con un marco de foto en la mano, se limpia una lágrima y se pone de pie, se dirige hasta la esquina de la habitación donde saca dos maletas y sale de la habitación.
Me doy la vuelta y me siento en la silla sin saber si bajar o quedarme aquí como un estúpido.
Escucho pasos subiendo por las escaleras y no tengo que abrir la puerta para saber quién es. Mierda. Me pongo de pie y abro la puerta, Emma estaba a punto de abrir la puerta de mi habitación cuando se giró abruptamente hacia la puerta en la que me encontraba.
Se acercó lentamente y me dio un abrazo. Se lo devolví y dejé un beso en su cabeza.
—¿Ya te vas?—. Preguntó tratando de hacerme el fuerte.
—Aún tengo unos minutos —. Dijo mientras se separaba de mí.
Bajamos las escaleras hasta que llegamos a la sala de estar.
—Bueno hay que aprovecharlo—. Mire el salón de música con duda.
Ella me miró y asintió, entramos al cuarto yo tomé mi guitarra y ella se sentó al frente del piano. Empezamos a tocar al mismo tiempo que empezamos a cantar Nuestra canción.
Diséñame que quiero ser todo lo que te guste,
Diséñame que yo autorizaré cualquier ajuste,
Quítame o ponme lo qué quieras.
Te doy mi esencia y mi verdad.
Para que saldes tus quimeras,
Y tu felicidad.Una vez terminamos de cantar escuchamos un pito del auto de papá. Mire por la ventana con ganas de ir y decirles a todos que se fueran que Emma se iba a quedar conmigo pero no podía, ella ni siquiera me había dicho que no se quería ir.
—Ya es hora —. Se dio la vuelta y me dedicó una sonrisa.
Nos pusimos de pie y empezamos a caminar hasta afuera donde ella ya tenía sus maletas, cuando ya estábamos en la entrada se dio la vuelta y me abrazó, le devolví el abrazo, se separó de mí y me dio un beso en los labios.