¡TRAILER en el primer capítulo!
History of enemies to lovers.
Malva es una adolescente que comienza a tener sentimientos por Sacc, el chico popular..
Sin ningún tipo de explicación de cómo paso de odiarlo a amarlo, va descubriendo cómo su vida resul...
El aire volvió a entrar en mi cuerpo y me abalancé a sus brazos para hundir mi rostro en su pecho. Sacc me tomó con firmeza y me atrajo lo más cerca posible.
–No podemos estar juntos Malvita.. –dijo con ternura, como si toda la vida me hubiera llamado así–, yo solo te hago daño, y estoy dispuesto a matarme en vida antes de seguir haciéndote sufrir.
Esas fueron las últimas palabras de la noche. Solos nos abrazamos y lloramos, por horas..
Cuando el sol salió, todo lo que podía ver era el inicio de otro día de mentira.
¿Cómo vivir realmente, si no sabes que fue (ni que es) de tu vida?
Sacc.
El más grande de mis dolores.
Se había marchado sin decir nada, depositando un beso en mi mejilla.
Tuve la extraña sensación de que sería la última vez que lo tendría cerca, y eso me generaba piel de gallina..
Decidí levantarme de una buena vez y llevé mi trasero a la cocina, debía comer algo..
Jos dormía profundamente, había trabajado toda la noche.
Puse agua a calentar para hacerme un té y me preparé unas tostadas.. hoy debía ir al instituto. Rodeé mis ojos y mi cuerpo se desplomó sobre la silla, ¿Qué ha caso no podía parar el tiempo por unos minutos?
–¿Noche difícil? –oí decir detrás de mí. Me sobresalté de inmediato y me puse de pie, ¿Cómo era posible? Lo miré con mis ojos bien abiertos y asustada– Wow.. tranquila –dijo riendo bobamente, la puerta de atrás estaba abierta.. –solté un suspiro de alivio, supongo que no era un asesino serial después de todo.
–¿Sabes que existen los timbres no?– dije sarcásticamente, mientras sacaba el agua del fuego.
–Lo siento.. –rio mientras reposaba su cuerpo en el marco de la puerta. Sus ojos celestes me observaron con cariño y me brindó una sonrisa 'amigable'. Por dios.. era tan apuesto que me ponía nerviosa.
–Luis, ¿Qué haces aquí? Creo que dejé bien en claro que no los quería ver más.. –sin ánimos de pelear, preparé mi té.
–Si, acerca de eso.. –volví a sus ojos y él los evitó. Se sentó en la silla de al lado y soltó un suspiro– ¿Podemos hablar? –su voz era tan tranquila y suave, sus rizos dorados caían sobre su frente y el sol que entraba por la ventana los hacía brillar.
–Depende.. –dije sentándome– ¿De qué quieres hablar?– el me brindó una cálida sonrisa..
–Quiero que sepas que siempre voy a estar aquí para a ti. –su voz se puso seria y clavó sus ojos sobre los míos– No importa que pase, yo siempre estaré de tu lado, ¿Entiendes? – mis manos que rodeaban la taza y sentían el calor que emanaba comenzaron a transpirar y por poco dejo caer el té, lo miré confundida y me senté de manera de quedar en frente de él. Sus piernas me rodearon y se sentó más erguido. –Además, quería pedirte perdón..
–¿Perdón? – dije intentando no perder la cordura, su roce en mis piernas me desequilibraba– ¿Qué es todo esto Luis? – dije ladeando la cabeza cansada– es como si todos supieran que sucede excepto yo, y por alguna extraña razón no puedo averiguarlo.. de verdad, ¡no puedo siquiera preguntar! –me sobresalté, de inmediato el reposó una de sus manos en mi muslos intentando contenerme, pero resultó ser peor– ¿Sabes lo frustrante que es que tu cabeza juegue en tu contra? –lo mire y estoy segura que parecía completamente loca– ¿A caso amo, a caso odio.. tengo miedo o estoy triste? ¿De dónde vienen estas emociones Luis.. puedes explicarme eso? ¿Como es posible que mi propio interior me obligue a mantenerme callada, a no preguntar, a estar lejos..? ¡cuando todo es un misterio!
–Malva.. –su mano viajó desde mi muslo a mi mejilla–, lo siento tanto. – el sentía pena por mí, lo sabía, pero no estaba dispuesto a hablar.
–Si no puedes responder ninguna de estas preguntas, entonces no deberíamos hablar más.. –dije poniéndome de pie– vete.
Luis dejó caer su espalda sobre el respaldar de la silla y me observó apenado, se paró lentamente y camino hasta ponerse a mi lado, con una mano sujetó mi mejilla y acercó mi rostro al suyo, depositando un húmedo beso sobre mi frente.
–No olvides lo que te dije. – dijo conectando nuestras miradas– Estoy aquí.. siempre. –diciendo esto se alejó– Me quedaré unos días con mi tía Peny, ella trabaja a unas cuadras de tu casa, si me necesitas allí estaré.
Diciendo esto se marchó. Apenas escuché la puerta cerrarse solté un suspiro y dejé salir algunas lágrimas.. ni siquiera podía tomar mi té, se había enfriado.
Decidí darme una ducha de agua caliente y ese maldito chillido apareció. Aturdida por completo, tuve que sentarme en el piso de la bañera para evitar caerme.. ¿Qué era esto? ¿me estaba volviendo loca? Sentía que no podía ni respirar.. tapé mis odios con ambas manos y dejé que el agua callera sobre mi cuerpo. Al cabo de unos minutos el sonido desapareció y recuperé la cordura.. esto me estaba asustando cada vez más.
Mi humor había empeorado, pero como no tenía escapatoria, me dirigí a casa de Darla para ir al instituto. Al salir de casa, pude ver a James esperándome en su auto, le dediqué una mirada fría y seguí caminando a la casa de mi amiga. Él no dijo ni una palabra y solo se quedó allí, viéndome marchar.
Las clases fueron un infierno. Sacc no estaba allí y Amara apenas parecía haberse sacado el pijama, ella parecía perdida.. incluso más que yo, y eso es decir mucho.
James parecía estar en todos lados, como una pulga persiguiendo a un perro. Quería que desapareciera, pero a la vez me sentía segura.
En clase de historia la profesora me pidió retirarme a la oficina del director. Miré confundida a Darla y esta me miró igual.
Abrí la puerta de la oficina lentamente y él me pidió sentarme.
¿Qué estaba sucediendo?
–Lo siento Fidgrinch.. –dijo con pena en sus ojos– su padre tuvo un accidente.
Y eso fue lo último que recuerdo con claridad.
A partir de allí el tiempo pareció manejarse con sus propias reglas. De un minuto a otro aparecí en el hospital y vi a enfermeras correr por todos lados..
Un colectivo se salió de control y generó un gran accidente, muchas personas se encontraban afectadas.. todo era un desastre.
Nadie podía darme información, todos estaban apurados o corriendo.
Me senté en el pasillo de urgencias, reposé mi espalda en la pared y perdí mis ojos sobre la gente.
Ni siquiera podía llorar, es como si mi cerebro se hubiera pausado o algo así..
Pero no podía perderlo, era lo único que tenía.
——————————😶🌫️————————-
Holaaaa mis amores 🥰☺️❤️
Como andannnnn???????
Que opinan de este capítulo??? Yo se que hay muchas dudas, pero les juro que la espera va a valer la pena 🙈🙉🙊
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.