No me olvides ♥

Capítulo 56

-Estas cómoda?- dijo Fernando.

-Te digo la verdad? No! Para nada.

El muy hijo de su madre me había dicho que para salvar la vida de Alex y mía tenia que trabajar para él. Acepte con mucho gusto porque pensé que iba a ser el mismo trabajo que cuando estaba con Alex pero...me equivoque!
El muy desgraciado me había comprado un traje de secretaria que consistía en una blusa blanca exageradamente descotada, una pollera bien apretada y corta, y unos zapatos negros charolados de taco aguja. Si Alex aparecía entonces estaba mas que dispuesta a hacerle pagar todo esto de una manera bastante dolorosa.

-Que es lo que te incomoda hermosa?

-Aamm...todo. La falda, la blusa y los zapatos.

-Pero mi vida, tienes que estar presentable para recibir a mis visitas, no puedes recibirlas con un pantalón sucio y una remera olgada.- maldito rufián, sus palabras son solo excusas para verme casi desnuda.

-Okey, pero por lo menos ¿podria ponerme las zapatillas?- dije tratando de convencerlo.

-No hermosa, no quedarias presentable entonces.- ¡Maldito! pronto me las vas a pagar, pensé con rabia.

-Okey, que es lo que tengo que hacer?

-Bien-,dijo mientras caminabamos por su enorme casa- Esta- dijo abriendo una puerta de madera que estaba en medio de una ventana de cristal con cortinas negras.-Es mi oficina.

La oficina era enorme, lo primero que vi fue la impresionante vista de toda una ciudad, era un ventanal hermoso y enorme, a un costado había una mesa muy elegante con papeles y todo lo que tiene una persona importante, y del lado opuesto había otra mesa completamente vacía.
Fernando vio que estaba observando la mesa vacía y dijo:

-Esa va a ser tu mesa, te vas a encargar de mis citas, del telefono y de los futuros encargos que llegue a tener. Puedes decorar tu mesa como quieras.

-Aamm...se que no tiene nada que ver lo que diga ahora pero...¿donde voy a dormir?- el inútil hizo una risa bastante irónica para mi gusto.

-Eres tan graciosa, es obvio que vas a dormir conmigo.

-Aamm...okey- Si pensaron que no pensaba en nada en ese momento, están equivocados. Odiaba a Alex profundamente y ya estaba empezando a pensar que no me estaba buscando, yo siempre fui una molestia para ellos, no creo que estén preocupados por mi.

-Bien, en unos minutos voy a tener una reunión con unas personas muy importantes, quiero que vayas al subsuelo para traer la comida y la bebida para ellos, ¿esta claro?

-Si, como el agua.

-Ven aquí- dijo y se acercó a mi, me agarró de la cabeza y me hablo al oído- Si tratas de escapar o de hacer alguna locura, la vas a pasar muy mal, entendiste? Estoy siendo muy bueno contigo, espero que me valores y hagas las cosas bien, entendido?.
Asustada solo asentí varias veces con la cabeza.

-Ve a buscar las cosas que te pedí que en un rato vienen, y acordate, si haces algo lo sabré- dijo señalando una cámara que había a un lado de la oficina.