Fragmento 2

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El arte de mirarte.

(Min Yoongi. 23 años)
(Otoño, 1996)

"Vamos Min debes de ser mejor que eso- rió- O probablemente por eso no eres bailarín"

"Si supieras cuantas veces me has apoyado en silencio, seguramente te sorprenderías de la cantidad de 0 que tiene la cifra"

"No crees que probablemente estés hecho para ser un artista y no un doctor? Ya sabes, a veces pensamos que seguir los consejos ajenos es más seguro que perseguir tus sueños"

"Quisiera poder ser como tú,  ya sabes. Darme un tiempo para saber que estoy en lo correcto, tal vez visitar algún lugar fuera de la ciudad. ¿Conoces alguno?"

"Creo que sería increíble salir juntos. Como… amigos"

Durante todo este tiempo que he estado en las afueras de Seúl tratando de encontrarle sentido y solución al problema de seguir en mis estudios como médico, hasta ahora solo he encontrado una constante que podría generar problemas cardíacos difíciles de explicar.

Ya que bueno si tomamos en cuenta que el corazón genera entre unos 60 a 100 latidos por minuto, y los míos al tener una constante como…. "Esa" genera por momentos unos 110 a 120 por minuto, podríamos decir que sufro de taquicardias.

Sin embargo y para mi seguridad, no tengo ningún padecimiento que desgaste mi corazón a un ritmo tal que se consideré peligroso. Más bien, la constante no es algo, sino… alguien.

-Creo que podemos hacerlo- me alente- Después de todo conversamos y hemos compartido algunas opiniones- rasque mi nuca- Entonces creo que una cita no estaría mal, ¿cierto?-

Bien, debo de admitir que nunca antes me había comportado de esta manera, claro que había tenido citas. De hecho 5 eran el número exacto para resumir mi vida amorosa, la cual no era para nada exitosa. A las chicas no siempre les gustan los chicos que pasan la mayoría del tiempo en una biblioteca buscando cualquier argumento o investigación sobre las múltiples fallas cardíacas que se pueden llegar a tener en una operación.

Además, el otro punto a mi contra es que las chicas eran quienes me invitaban a salir, y con ello no me refiera a que fuera todo un don casanova en la universidad, simplemente pasaba. Y por más que intentaba rechazarlas, mi madre se esperaba en brindarme consejos de gran peso moral como para hacerme aceptar y salir con ellas.

Pero la verdad es que no me interesaba en absoluto salir con alguien.

Al Menos no hasta ahora.

-Un bello tulipán amarillo para el joven Min- mencionó la señora Kim, dueña de la floreria local- Vaya que deseas ser detallista desde el comienzo- Sonrió mientras tomaba el billete que le daba- Supongo que es linda como para llamar la atención del único nieto de la familia-

Rasque mi nuca.

-La verdad es que no creo que sea importante- tomé el cambio- Además… que sea el único descendiente en la familia no me hace especial-

-¡Bromeas!- exclamó con exageración- Eres un Min, él único que salió del pueblo para tener grados de estudios más altos que la mayoría, sin contar el hecho de que eres apuesto- sonrió mientras envolvía la rosa en papel- La mayoría de las chicas giran a verte-

Sonreí apenado.

-Bueno, gracias pero no me interesa-

Tomé de nuevo la flor que ahora tenía una presentación diferente,  ya que el papel y las envolturas la hacían lucir más elegante, seguramente le agradaría. Ella merece mucho más que esto, pero para mi esto es especial ya que nunca e regalado flores.

🖤PROYECTO 93🖤: En otra vida seremos lo que no pudimos ser. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora